Desarrollo alarmante: Un grupo de turistas ha robado una langosta viva de 5 kilos de un acuario en el restaurante Il Rifugio dei Naviganti en la isla italiana de Ponza, causando caos y violencia. Los hechos ocurrieron la noche del 12 de julio, cuando los jóvenes sustrajeron el crustáceo, lo que llevó al dueño del local, Mario Coppa, a iniciar una persecución.
Testigos informan que Coppa fue alertado del robo por transeúntes, quienes le avisaron sobre el incidente. Al localizar a los turistas, se desató una violenta pelea entre ellos, el propietario y algunos testigos. Según el relato de Coppa, durante la confrontación, fue agredido por la espalda y pateado por los involucrados, que hablaban inglés. En un intento de defenderse, lanzó una silla, hiriendo accidentalmente a un joven que trataba de ayudarlo.
El gerente del restaurante sufrió lesiones más graves y fue traslado en helicóptero a un hospital para recibir atención médica. A pesar de la conmoción, la langosta logró sobrevivir al altercado. Coppa declaró: «Estaba viva cuando la recuperamos, así que decidimos liberarla en lugar de devolverla al tanque».
Este restaurante, conocido por su polémica factura de 923 euros por una comida para cuatro personas que incluía la famosa langosta, ha sido objeto de críticas en redes sociales. La situación ha atraído la atención internacional, resaltando el impacto del robo y la violencia en la vida cotidiana de los locales y visitantes en la isla.
A medida que se desarrollan los acontecimientos, se espera que las autoridades investiguen el incidente, y los turistas involucrados podrían enfrentar consecuencias legales. La comunidad local está en shock por la violencia y el descontrol que se generó a partir de un simple robo.
Con el restaurante ya en el ojo del huracán por sus precios elevados y ahora por este escándalo, el futuro de Il Rifugio dei Naviganti pende de un hilo. Los residentes y visitantes están ansiosos por saber qué medidas se tomarán a continuación para evitar que incidentes como este vuelvan a ocurrir.
