Desarrollo urgente: Sacyl ha lanzado un ambicioso plan integral para transformar el diagnóstico y tratamiento de la migraña en Castilla y León, una medida necesaria que busca acabar con el estigma que rodea a esta enfermedad. Este plan, anunciado hoy, tiene como objetivo llegar a todos los rincones de la comunidad, mejorando la atención a los pacientes que sufren de esta afección debilitante.
La migraña es una enfermedad neurológica que afecta a un 20% de mujeres y a un 8% de hombres, causando graves repercusiones en la calidad de vida de quienes la padecen. Según datos recientes, el 40% de los pacientes necesita un tratamiento preventivo, pero solo entre un 15% y un 20% lo recibe, lo que evidencia una alarmante necesidad no cubierta.
Ángel Guerrero Peral, coordinador de la Unidad de Cefaleas del Hospital Clínico Universitario de Valladolid, explica que esta situación se traduce en un aumento del absentismo laboral y en un menor rendimiento en quienes, a pesar del dolor, asisten al trabajo. «Más de dos terceras partes del coste de la migraña provienen de esa pérdida de productividad», agrega.
El plan se fundamenta en tres ejes principales: la coordinación entre niveles asistenciales, la atención personalizada y la capacitación de los médicos. «Es fundamental que cada paciente reciba la atención adecuada según sus necesidades, sin importar si es atendido en atención primaria, urgencias o en un hospital», resalta Guerrero Peral.
Además, se implementarán sesiones de formación que combinarán actividades presenciales y en ‘streaming’ para garantizar la participación de todos los profesionales de la salud en Castilla y León. «Lo que hacemos en nuestras consultas se puede replicar en cualquier lugar con la formación adecuada», añade Guerrero Peral, enfatizando que el diagnóstico de la migraña es clínico y, si se escucha a los pacientes, puede ser «muy sencillo».
La iniciativa busca no solo mejorar el tratamiento de la migraña, sino también romper con el estigma que afecta a quienes la padecen. «La falta de un marcador biológico ha hecho que ni los médicos ni los pacientes se crean la enfermedad, lo que perpetúa la idea de que no es real», concluye Guerrero Peral, quien aboga por un cambio en la percepción social y médica hacia esta condición.
El impacto de este nuevo plan de Sacyl es inminente y se espera que transforme la manera en que se aborda la migraña en toda la comunidad, ofreciendo a los pacientes una vida con menos dolor y mayor calidad. Con esta estrategia, se espera que más personas reciban el tratamiento que necesitan y se reduzca el estigma asociado a esta enfermedad.