Desarrollo urgente: Anchorage se moviliza contra la llegada de Vladimir Putin, quien se reunirá con Donald Trump en una cumbre histórica este viernes. Alrededor de 500 manifestantes han tomado las calles de la ciudad más grande de Alaska, expresando su rechazo a la visita del presidente ruso, a quien califican de “criminal de guerra”.
La concentración, que incluye un mar de banderas de Ucrania y carteles con lemas como «no queremos criminales de guerra en Alaska», ha creado un ambiente festivo pero de fuerte protesta. «Putin no debería ser bienvenido en nuestro país», comentó Rachel Coney a EFE, mientras las movilizaciones se intensifican con la llegada inminente del mandatario ruso.
Putin, que llegó esta mañana a Magadán y planea visitar un monumento a la amistad entre la URSS y EEUU, se dirige a Alaska donde se reunirá con Trump en la base aérea de Elmendorf-Richardson. «Alaska está con Ucrania», rezan algunos carteles, mientras los habitantes de la región expresan su orgullo por su tierra y su rechazo a la visita.
Las protestas en Anchorage han cobrado un nuevo impulso. «Esta es la concentración más grande que hemos visto hasta ahora», afirmó Marie Allen Lambert, resaltando el descontento local hacia Trump y su relación con Putin, a quien acusan de ser responsable de innumerables muertes.
El encuentro entre Trump y Putin se lleva a cabo en un contexto de creciente tensión, especialmente con los continuos ataques rusos en Ucrania, que han desplazado a miles de personas. Trump ha disminuido las expectativas sobre la posibilidad de un acuerdo de paz, reconociendo que lograrlo es más complicado de lo que había anticipado.
Con la atención del mundo en Anchorage, la comunidad se prepara para una jornada marcada por la protesta y la historia, ya que es la primera vez que un presidente ruso visita este territorio, una antigua colonia rusa hasta 1867. Las movilizaciones continuarán, reflejando el firme rechazo a la política de Putin y el deseo de paz en Ucrania, mientras los residentes de Anchorage se preparan para manifestarse nuevamente en las próximas horas.