Desarrollo impactante: Un oso sorprendió a dos vecinos en Cabezón de Liébana al anochecer, causando un susto y daños en su vehículo. El incidente, que sucedió cuando los hermanos regresaban de Yebas hacia Los Cos, dejó un rayón en la defensa del coche tras un zarpazo del animal, según el alcalde Jesús Fuente.
Las autoridades confirmaron que este tipo de encuentros, aunque poco frecuentes, no son inéditos en la región. Ángel Serdio, director general de Montes del Gobierno de Cantabria, destacó que «es algo bastante habitual» en las áreas cercanas a los pueblos. Sin embargo, el alcalde aclaró que los osos generalmente no se acercan a las viviendas, aunque en ocasiones se les ha visto en lugares como Pesaguero y Cueva, donde uno fue visto comiendo ciruelas en una casa.
El contexto revela que en la Cordillera Cantábrica hay un total de 370 ejemplares, según el último censo poblacional de 2020. De estos, al menos 32 osos habitan permanentemente en Cantabria, representando aproximadamente el 8% de la población total. Sin embargo, expertos como Guillermo Palomera, presidente de la Fundación Oso Pardo, sugieren que esta cifra podría estar subestimada.
Este incidente ha generado preocupación entre los residentes, quienes temen un mayor acercamiento de la fauna salvaje a las áreas pobladas. Sin embargo, las autoridades recalcan que los osos son parte del ecosistema local y que, aunque es recomendable tener precaución, no hay motivo para el pánico generalizado.
Los expertos sugieren que la temporada de cerezas y otros frutos puede atraer a los osos hacia el pueblo, donde encuentran fácil acceso a alimentos. A medida que la población de osos en Cantabria sigue creciendo, es probable que los encuentros se vuelvan más comunes, lo que lleva a las autoridades a instar a los ciudadanos a ser conscientes de su entorno.
Las próximas semanas serán cruciales para observar si estos encuentros aumentan, especialmente con la llegada de la temporada de frutos. Las autoridades seguirán monitorizando la situación y brindando recomendaciones para asegurar la convivencia entre los humanos y la fauna silvestre.