Las obras en la Cuesta de los Gitanos de Teruel están en marcha y se prevé que finalicen a finales de noviembre, tras superar varios contratiempos. La junta de gobierno aprobó recientemente una nueva certificación de 40,233 euros para continuar con los trabajos adjudicados a la empresa pública Tragsa. El concejal de Infraestructuras, Juan Carlos Cruzado, mostró su confianza en que se logre concluir dentro del plazo, especialmente después de reparar roturas en dos tuberías que retrasaron la obra.
El asfaltado y pintado de la calzada podría completarse en una semana, y si todo avanza según lo planeado, se logrará cumplir con los tiempos establecidos. Las obras, que comenzaron a finales de enero, han cortado el tráfico rodado en una de las principales vías de acceso a la ciudad desde la variante sur y la carretera de Villaspesa.
Este proyecto, que cuenta con el apoyo de la Diputación de Teruel, implica una inversión total de 916,165.96 euros, incluyendo un IVA del 21%. Esta mejora no solo facilitará el tránsito, sino que también incrementará la seguridad, ya que el paso bajo la vía férrea era tan estrecho que no permitía el cruce de dos vehículos.
La nueva vía tendrá una anchura de nueve metros, con dos carriles de tres metros cada uno, un carril bici de un metro de ancho y una acera de dos metros. Además, se plantarán árboles a lo largo del tramo, lo que mejorará el entorno urbano. La obra también incluye una nueva red de distribución de agua potable que conectará el Polígono Residencial Sur con el suministro de agua de la ciudad.
Los trabajos de estabilización de la ladera en el Barrio del Carmen también fueron aprobados por procedimiento de emergencia, reflejando la urgencia en la mejora de las infraestructuras de la ciudad. Este desarrollo es crucial para garantizar la seguridad y la movilidad de los ciudadanos, marcando un avance significativo para Teruel en su planificación urbana.
A medida que las obras continúan, la atención se centra en el cumplimiento de los plazos y en la respuesta de la comunidad ante estas mejoras tan esperadas. Los ciudadanos y las autoridades están expectantes, ya que la finalización de este proyecto no solo transformará una vía esencial, sino que también revitalizará la conexión entre barrios y mejorará la calidad de vida en Teruel.