Los obispos españoles han **respaldado** hoy a la **Comisión Islámica de España** en una declaración contundente sobre la **libertad religiosa**, tras la reciente moción del **Ayuntamiento de Jumilla** que busca prohibir actividades ajenas al deporte en instalaciones públicas. Esta postura se da en medio de un contexto donde las celebraciones musulmanas, como el **Ramadán** y la **Fiesta del Cordero**, han tenido lugar en estos espacios.
El presidente de la **Conferencia Episcopal**, **Luis Argüello**, y su vicepresidente, **José Cobo**, han afirmado que las manifestaciones religiosas son un derecho humano fundamental amparado por el **artículo 16.1** de la **Constitución Española**, el cual garantiza la libertad ideológica y religiosa. Las fuentes de la **CEE** subrayan que cualquier intervención pública debe centrarse en la **perturbación del orden público** y ser evaluada de manera objetiva por especialistas.
En la moción aprobada por el Ayuntamiento de Jumilla, impulsada por el **PP** y con el apoyo de **Vox**, se insta al gobierno local a promover actividades culturales que defiendan la identidad española y protejan los valores religiosos. Sin embargo, los obispos advierten que limitar derechos religiosos no solo afecta a un grupo, sino que es una forma de **discriminación** que no puede tolerarse en sociedades democráticas.
Este desarrollo se produce en un clima de creciente tensión sobre la libertad religiosa en España, donde la diversidad cultural y religiosa está en el centro del debate público. Las declaraciones de los obispos resaltan que las restricciones deben ser aplicadas de manera equitativa y no solo a las actividades religiosas, sino a cualquier manifestación en espacios públicos.
La **Declaración de los Derechos Humanos** también es citada, enfatizando que toda persona tiene el derecho a la libertad de **pensamiento, conciencia y religión**, lo cual incluye la **libertad de manifestar su religión** tanto en público como en privado. Este apoyo de la **Conferencia Episcopal Española** marca un momento crucial en la discusión sobre la libertad religiosa en el país, y se espera que continúe generando debate en los próximos días.
Con esta posición, los obispos esperan que las autoridades reconsideren cualquier decisión que pueda tomarse en Jumilla y aboguen por un enfoque que respete la diversidad religiosa y cultural que caracteriza a España hoy. Este desarrollo está siendo seguido de cerca por diversas organizaciones y grupos religiosos, que abogan por un diálogo abierto y respetuoso sobre estos temas críticos.
