Mario Vilau triunfa en la final del Circuito Valenciano de Novilladas
La Plaza de Toros de Villena se llenó de emoción y fervor en la esperada final del Circuito Valenciano de Novilladas, donde el barcelonés Mario Vilau dejó una huella imborrable con su actuación. La jornada, marcada por el ambiente festivo, culminó en un espectáculo que mantuvo a los asistentes al borde de sus asientos.
Con un cartel prometedor, los novilleros comenzaron la tarde con la ilusión de dejarlo todo en el ruedo. El primero en brillar fue Simón Andreu, quien se llevó la primera oreja tras una faena sólida y comprometida con su primer novillo. Su destreza en las banderillas hizo vibrar al público, que no dudó en vitorear su nombre.
El impacto llegó cuando Mario Vilau tomó el ruedo. Tras recibir a su segundo novillo con una impresionante voltereta, demostró su valentía y maestría al torear con la mano izquierda, logrando conectar con el público de una manera excepcional. Con un estilo clásico y elegante, sumó dos orejas a su cuenta, elevando la tensión y la expectativa en la plaza.
La tarde se tornó aún más emocionante cuando Vilau se enfrentó a su quinto novillo, donde nuevamente mostró su calidad y control. Brindó el novillo a la secretaria autonómica de Cultura, Pilar Tébar, destacando la importancia de la promoción de la tauromaquia. Su entrega y técnica le valieron otras dos orejas, completando así una actuación memorable con un total de cuatro orejas en su haber.
El tercer novillo, lidiado por Juan Alberto Torrijos, también dejó una impresión duradera al recibir aplausos desde el inicio. Su habilidad para conectar con el novillo y ejecutar series de gran calidad fue impresionante, culminando en la obtención de dos orejas.
El evento no solo fue una celebración del talento novillero, sino también una muestra del arduo trabajo de la Fundación Toro de Lidia y de la Generalitat Valenciana, quienes han elevado el nivel del circuito y la emoción de los aficionados. La final del Circuito Valenciano de Novilladas no solo dejó un gran sabor de boca, sino que también reafirmó el compromiso de todos los involucrados en la promoción de la tauromaquia en la región.
Los asistentes, eufóricos, salieron de la plaza con el deseo de más, marcando un hito en la temporada taurina de 2025 y dejando claro que el futuro del toreo sigue brillando con fuerza.
