La violencia de género se convierte en un grito urgente en España
La situación de violencia de género en España se torna alarmante, con 38 mujeres asesinadas en lo que va de 2025, un recordatorio impactante de la profunda desigualdad que persiste en la sociedad. Este 25 de noviembre, Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, se pone de manifiesto que este problema no es simplemente una «lacra», sino un sistema estructural que afecta a todas las mujeres.
Recientes informes indican que uno de cada cinco jóvenes cree que la violencia de género es un «invento ideológico», con el porcentaje aumentando del 12% al 23% en unos pocos años, evidenciando la desinformación que se propaga rápidamente. Según la Macroencuesta de Violencia contra la Mujer, una de cada dos mujeres en España ha sufrido violencia por el hecho de serlo, un dato que no se puede negar.
Desmitificando la violencia machista
Los mitos sobre la violencia machista continúan circulando, como el de que solo afecta a mujeres de bajos recursos o sin educación. En realidad, solo el 13,4% de las víctimas entre 2003 y 2023 tenía estudios de primaria o inferiores, mostrando que el problema trasciende el nivel educativo. Isabel Ilzarbe, doctora en Historia y víctima de maltrato durante 15 años, es un testimonio claro de que el abuso no discrimina.
Además, el estudio de APRAMP revela que la prostitución no es una elección, sino una explotación que afecta a muchas mujeres, desafiando el mito de que algunas ejercen de forma voluntaria. La superviviente Lorena Ro resalta que «cuando la desesperación llama a tu puerta, dejas de hacer las cosas porque quieres».
Los datos no mienten; el paro femenino es un 2,32% superior al masculino, y el 86,9% de las excedencias por cuidados son solicitadas por mujeres. La brecha salarial aún se mantiene en 29,382 € frente a 24,360 € para hombres, lo que demuestra que la igualdad sigue siendo un objetivo inalcanzable.
La lucha por la igualdad continúa
Mientras sigan existiendo asesinatos de mujeres por ser mujeres, el discurso de la igualdad plena se convierte en un espejismo. La violencia de género es un sistema que enferma todo lo que toca y necesita ser abordado con políticas sostenibles y educación. En este 25N, es crucial recordar que el feminismo no busca privilegios, sino equilibrios, y que aún queda un largo camino por recorrer para alcanzar una sociedad donde las mujeres puedan vivir sin miedo.
Este llamado urgente a la acción debe resonar en toda España, donde la igualdad no solo es un derecho, sino una necesidad apremiante. La lucha sigue, y el momento de actuar es ahora.
