La Geoda de Pulpí ha experimentado un verano explosivo tras su reapertura el 7 de junio, registrando una media de 250 visitantes diarios, el máximo permitido por el enclave. Este increíble flujo de turistas ha superado todas las previsiones, impulsado por la ampliación de actividades y espacios turísticos en el municipio.
El teniente de alcalde y concejal de Geoda, Juan Bautista López, confirmó que las condiciones de humedad y conservación de la mina obligan a organizar grupos reducidos de apenas 15 personas cada media hora, lo que ha llevado a que muchos visitantes se queden con ganas de entrar. «Siempre se superan las expectativas, porque hay mucha gente que desea visitar la geoda», afirmó López.
Las visitas a la Geoda se mantienen constantes a lo largo de la semana, sin importar si es martes o domingo, con la excepción de los lunes, cuando el lugar está cerrado para trabajos de mantenimiento y grabaciones que no interfieren con la experiencia de los visitantes. La alta demanda ha llevado a la necesidad de reservar con antelación, aunque López indicó que frecuentemente se pueden reubicar a parejas o pequeños grupos en caso de cancelaciones, animando a los interesados a intentar conseguir una plaza.
Este año, la oferta turística ha crecido con la inclusión de una visita virtual de los fondos marinos, una exposición de esparto y minerales, y una sala dedicada al pintor Pedro Antonio, que se une al castillo en la entrada conjunta con la geoda. «Cada vez viene más gente, y eso beneficia a todo el municipio, que es precisamente la idea: que conozcan más sobre Pulpí», destacó López.
Durante el cierre, el Ayuntamiento trabajó arduamente en la reubicación de entradas previamente vendidas, asegurando que prácticamente todos los visitantes afectados han podido elegir una nueva fecha. «Seguimos siendo noticia cada semana, y eso nos ayuda a mantenernos en primera línea», remarcó el edil.
En un contexto más amplio, la Geoda de Pulpí forma parte desde enero de la Lista Indicativa para ser declarada Patrimonio Mundial por UNESCO. López explicó que el Ayuntamiento colabora con la Junta de Andalucía, el Ministerio de Cultura y un comité de expertos internacionales en cristalografía y geología para preparar la candidatura, que también involucra a la Universidad de Almería mediante la creación de una cátedra específica.
«Nuestra geoda es única en el mundo. Puede haber otras más pequeñas, pero ninguna con las dimensiones y condiciones de la nuestra», insistió López, añadiendo que aún «quedarán unos años» para que UNESCO evalúe la candidatura, dado que el proceso requiere informes técnicos y revisiones por parte del Ministerio antes de una valoración final internacional.
Con la Geoda de Pulpí en el foco mediático y un creciente número de visitantes, el futuro se presenta prometedor, atrayendo no solo a turistas, sino también a investigadores y amantes de la geología que buscan descubrir este tesoro natural.