Desarrollo urgente: La Fiscalía de Málaga ha solicitado el cierre del medio digital Alerta Digital y la prisión para su director, Armando Robles, alegando incitación al odio, especialmente en relación a la inmigración africana. Este hecho ha generado gran controversia y un debate sobre la libertad de expresión en España, donde Robles ha defendido su línea editorial ante las acusaciones.
El juicio está programado para el próximo miércoles, y Robles ha manifestado su rechazo a las acusaciones, asegurando que Alerta Digital ha publicado más de un millón de artículos de diversas tendencias, defendiendo a quienes han sido invisibilizados por otros medios. Según Robles, reducir su trayectoria periodística a un enfoque en la inmigración es una grave falta a la verdad.
En la entrevista, el director de Alerta Digital destacó que si viviera en Pakistán o Afganistán, la fiscal podría haber solicitado la pena de muerte por sus opiniones, lo que pone en evidencia la situación de la libertad de expresión en diferentes contextos culturales. Robles argumenta que su medio busca informar de manera objetiva y que su línea editorial no es antiislámica, sino que se basa en la defensa de valores cristianos y europeos.
La fiscal María Teresa Verdugo Moreno ha criticado la línea editorial de Alerta Digital, señalando que promueve una visión negativa de la inmigración africana. Robles, por su parte, defiende que la inmigración debe ajustarse a las necesidades de la nación, independientemente de su origen, y que su medio ha tratado de dar voz a los que no la tienen, condenando la precarización del empleo que afecta a inmigrantes.
Con esta situación, Robles y su equipo legal, liderado por Estanislao de Kostka, están preparados para defender tanto la integridad de Alerta Digital como su propia libertad personal ante lo que consideran un ataque a la democracia y a la libertad de expresión.
El impacto de este caso no solo afecta a Robles y a su equipo, sino que también plantea serias preguntas sobre la libertad de prensa en España. La comunidad de medios y los defensores de los derechos humanos observan con atención, ya que el resultado del juicio podría sentar un precedente sobre cómo se manejan las críticas y las opiniones en el contexto actual.
Los próximos días serán cruciales para el futuro de Alerta Digital y su director, un caso que podría repercutir en la manera en que se ejerce la libertad de expresión en el país.