Desarrollo urgente: La Casa Blanca ha calificado a Nicolás Maduro como un narcotraficante, señalando que lidera una de las redes de tráfico de cocaína más grandes del mundo. En un documento emitido recientemente, la Administración Trump enfatiza que se buscará llevar a Maduro y a otros miembros de su régimen ante la Justicia estadounidense, resaltando su compromiso con la lucha contra el narcotráfico.
La declaración se produce el mismo día en que el presidente Trump anunció un exitoso ataque del Ejército de los Estados Unidos a una embarcación proveniente de Venezuela, que estaba cargada de drogas y fue neutralizada en aguas del Caribe, resultando en la muerte de tres supuestos terroristas. Este ataque subraya la creciente tensión entre Estados Unidos y Venezuela, donde Maduro ha denunciado que el país norteamericano está planeando una agresión militar.
El documento de la Casa Blanca detalla que el régimen de Maduro, descrito como «criminal», seguirá siendo un objetivo prioritario. “Estados Unidos continuará buscando llevar a Maduro y a otros miembros de su régimen cómplice ante la Justicia por sus crímenes”, afirma un extracto del comunicado. Además, las autoridades estadounidenses han reiterado su intención de combatir a organizaciones terroristas extranjeras venezolanas, como el Tren de Aragua, y expulsarlas de su territorio.
Este anuncio marca un escalón significativo en las relaciones entre ambas naciones, con implicaciones que podrían afectar tanto la política interna venezolana como la seguridad regional. La presión internacional sobre Maduro se intensifica, y las acciones de Estados Unidos podrían derivar en un aumento de las tensiones y una respuesta militar por parte del régimen venezolano.
Con el clima político en Venezuela ya tenso, la respuesta de Maduro a estas acusaciones y acciones podría ser decisiva en los próximos días. La comunidad internacional estará atenta a cómo se desarrollen estos eventos y qué medidas tomarán las autoridades venezolanas en respuesta a las iniciativas de Washington.