El Hércules se enfrenta a un momento crítico este sábado a las 16:15 horas en el Rico Pérez donde su permanencia en la liga está en juego. La presión aumenta tras el empate en Antequera, sellado en el minuto 101 con un gol de Ben Hamed, lo que ha dejado a Rubén Torrecilla en una situación de interinidad peligrosa, ahora obligado a demostrar su valía.
El entrenador, expulsado en el último partido por «conducta contraria al buen orden deportivo», observará el juego desde el antepalco, añadiendo más tensión a un ambiente ya incómodo. También se perderá el partido Javi Jiménez, quien recibió una roja directa, dejando al equipo con menos opciones.
En cuanto a la alineación, Samu Vázquez podría regresar tras cinco jornadas de ausencia y ocupar su lugar en el lateral, mientras que Nacho Monsalve está en una situación similar. La defensa verá el regreso de Retuerta, quien se ha recuperado después de ser superado por un exjugador de la UD Ibiza.
Por otro lado, Jeremy de León espera su oportunidad de debutar como titular, pero el técnico podría optar por Carlos Rojas, ya recuperado, lo que podría significar un cambio en el esquema ofensivo. La incertidumbre reina en el equipo, ya que cualquier resultado negativo podría llevar al Hércules a la zona de descenso.
El Europa, rival de este sábado y equipo revelación de la temporada, ha sumado siete puntos en sus últimas cinco salidas y se presenta como un adversario difícil. Con un doblete reciente de Jordi Cano, el equipo barcelonés ha conseguido cinco triunfos en la liga, aumentando su ventaja sobre el Hércules a siete puntos.
La presión es palpable: el Hércules necesita urgentemente una victoria para evitar caer en la zona de descenso. La cita es crucial y solo vale ganar, lo que convierte este partido en un verdadero plebiscito para el futuro del club. La afición espera una respuesta contundente del equipo en un momento decisivo, donde el triunfo es la única opción que garantiza continuidad en esta temporada de incertidumbres.
