NUEVAS INICIATIVAS EN GIJÓN: Por primera vez, la ciudad contará con un obrador sin gluten gracias a la incansable labor de Eugenia Téllez, representante de la asociación Viviendo sin Gluten. Desde su diagnóstico de celiaquía hace cuatro años, Téllez ha buscado cambiar la situación para quienes padecen esta enfermedad, destacando que en Gijón «no hay eventos gastronómicos con opciones seguras para los celiacos».
La participación de un obrador sin gluten en el Mercado Artesano y Ecológico se concretará este fin de semana, tras la reciente inclusión de un espacio para ellos. «La gente alucina cuando ve que hay un obrador sin gluten con dulce y salado», afirma Téllez, quien subraya la importancia de ofrecer alternativas seguras y deliciosas.
IMPORTANCIA DE LA FORMACIÓN: El 22 de mayo, Téllez se reunió con el director general de Salud Pública del Principado, Ángel López, para presentar una lista de demandas cruciales. Entre ellas, la necesidad de un censo de personas celiacas para visibilizar sus necesidades y la formación en Atención Primaria y Enfermería, para que el diagnóstico no sea un camino solitario y costoso.
«Queremos que el primer paso no sea ir a la asociación y pagar un dineral, sino recibir orientación básica de los profesionales», explica Téllez. La asociación se ofrece a capacitar gratuitamente a hospitales y centros de salud, dando charlas informativas para que los recién diagnosticados tengan acceso a información esencial.
UN CAMINO HACIA LA INCLUSIÓN: Téllez está decidida a que nadie tenga que buscar información en redes sociales. Además, planea dar charlas gratuitas en asociaciones vecinales, para que tanto los celiacos como sus familias comprendan que una alimentación saludable no implica depender de productos procesados.
«Si en tu pueblo no hay opciones, hazte embajador, llama al ayuntamiento y ve a los restaurantes», sugiere Téllez, quien también trabaja en asesorar a establecimientos hosteleros sobre cómo ofrecer productos sin gluten de manera segura. A pesar de que hay muchos locales que ofrecen estas opciones, la falta de garantía sobre su preparación segura es un problema persistente.
Con más de 275,000 habitantes, Gijón aún tiene un largo camino por recorrer para convertirse en una ciudad inclusiva. La predisposición institucional es prometedora y Téllez confía en que sus esfuerzos generen un cambio significativo en la comunidad celiaca.
PRÓXIMOS PASOS: La implementación de un protocolo para evitar la contaminación cruzada en la cocina y la educación de los establecimientos son pasos vitales para asegurar que todos los celiacos en Gijón tengan acceso a opciones seguras y deliciosas. La lucha de Téllez continúa, y su optimismo es contagioso en un momento crucial para la comunidad.