Desarrollo urgente: Eugenia Fernández, trabajadora social y candidata a concejala por el Frente de Izquierda en La Matanza, ha comenzado su campaña con un claro mensaje: «Me gustaría que mis estudiantes y colegas jóvenes puedan tener un futuro diferente». Su propuesta se enfoca en la defensa de los derechos laborales y la lucha contra la precarización que afecta a los jóvenes en el distrito.
En un contexto donde el repudio social hacia los candidatos de La Libertad Avanza y su líder, Javier Milei, se intensifica, Fernández destaca la importancia de contar con bancas de izquierda. «Las bancas del FITU nos fortalecen para defender lo conquistado», afirmó durante un encuentro reciente.
Fernández, quien trabaja en el área de poblaciones vulnerables del ex-Ministerio de Trabajo, ha sido crítica con los recortes en políticas de discapacidad y pensiones que ha implementado el gobierno actual. «Estamos siendo atacados por el gobierno nacional», enfatizó, subrayando la necesidad de una respuesta política que represente a las mayorías trabajadoras.
La candidata, que también es docente en la Universidad Nacional de La Matanza, se ha comprometido a apoyar iniciativas que beneficien a las mujeres y a la comunidad LGBTIQ+. «Quiero llevar la voz de las mujeres y diversidades al Concejo Deliberante», declaró, refiriéndose a su compañera de lista, Natalia Hernández.
Fernández también ha sido parte activa del movimiento por los derechos humanos y contra la precarización laboral, recordando su experiencia como delegada de ATE en el Ministerio de Trabajo. «La precarización laboral es la precarización de nuestras vidas», aseguró, reflejando su compromiso con la mejora de las condiciones laborales.
Con las elecciones en la Provincia de Buenos Aires acercándose, Fernández y su equipo del Frente de Izquierda intensifican sus esfuerzos, organizando asambleas y encuentros para involucrar a la comunidad en su proyecto político. «Cada banca es un puesto de lucha», enfatizó, instando a la población a unirse a su causa.
El llamado de Eugenia Fernández no es solo político; es un clamor por un cambio que muchos en La Matanza consideran urgente. «Sabemos que detrás de cada laburante hay una familia, así que peleamos por todos», concluyó, reafirmando su compromiso de construir un futuro más justo y equitativo para todos.
