Desarrollo urgente: Estudiantes de la Universidad Nacional de Jujuy (UNJu) llevaron a cabo una manifestación hoy para exigir elecciones estudiantiles y en oposición al veto del presidente Javier Milei a la ley de financiamiento universitario. La movilización, denominada “ruidazo”, reunió a estudiantes independientes, el Malón Estudiantil, la Juventud del PTS, el MST y Ají 20, quienes buscan convocar a una asamblea extraordinaria para establecer una fecha para las elecciones y formar una junta electoral que incluya a todas las agrupaciones.
La protesta ocurre en un contexto de creciente descontento tras el anuncio del veto realizado por Milei, lo que ha intensificado la urgencia de organizar una gran marcha en el Congreso junto a otros sectores para enfrentar el plan de ajuste del gobierno. “Hoy hicimos un ruidazo en Humanidades de la UNJu. Preparemos desde abajo una marcha enorme para el día que se trate en el congreso”, expresó la activista Keila Zequeiros.
El veto de Milei ha dejado a muchos estudiantes indignados, quienes argumentan que el presidente no ha entendido el mensaje de las urnas y necesita escuchar la voz de la calle. A pesar de la magnitud de la protesta, los grupos peronistas y radicales, que tradicionalmente se autodenominan defensores de la universidad, estuvieron ausentes en la acción, lo que ha generado más controversia entre los asistentes.
Con el apoyo de las agrupaciones estudiantiles, se está llevando a cabo una campaña de firmas para lograr una asamblea que permita avanzar en la organización electoral y asegurar que todas las voces sean escuchadas. La falta de participación de ciertos sectores políticos en la manifestación ha sido un punto de discusión entre los presentes, que resaltan la necesidad de unidad en la lucha por el financiamiento de la educación.
La situación se mantiene en desarrollo y los estudiantes están convocando a más acciones en las próximas horas, con el objetivo de mantener la presión sobre el gobierno y asegurar que sus demandas no sean ignoradas. La fecha de la marcha en el Congreso aún está por definirse, pero la determinación de los estudiantes es clara: no se rendirán hasta que se respete su derecho a la democracia y al financiamiento adecuado de sus instituciones educativas.