Nuevo informe revela que el paro en la provincia de Teruel disminuyó un 4% en agosto de 2025, situándose en 3,923 desempleados, 163 menos que el año anterior. Sin embargo, la situación es alarmante ya que la contratación ha caído un 46,85% desde julio, mostrando una reducción drástica en el mercado laboral.
En general, la comunidad de Aragón también reporta un descenso del 5,14% en el paro en comparación con agosto de 2024, aunque se registró un leve aumento de 77 desempleados en comparación con julio, alcanzando un total de 48,481 personas15,5% en la contratación anual, dejando a la región con 34,084 contratos en agosto, un descenso mensual del 29,51%.
La brecha de género en el desempleo sigue presente, con 2,372 mujeres sin trabajo frente a 1,551 hombres. Alarmantemente, más de la mitad de las mujeres desempleadas tienen más de 45 años, lo que subraya la vulnerabilidad de este grupo en el mercado laboral.
En cuanto a la afiliación a la Seguridad Social, Teruel reportó 58,184 afiliados en agosto, con 12,509 autónomos, un ligero descenso en comparación con el mes anterior. Mientras tanto, a nivel nacional, el empleo sufrió una caída de 199,300 afiliados y un aumento de 21,905 desempleados, lo que indica una tendencia preocupante.
El director general de Política Económica del Gobierno de Aragón, Javier Martínez, minimizó el impacto del aumento del paro, calificando a la región como «resiliente para el empleo» y prometió que el gobierno trabajará para que «toda persona que quiera trabajar pueda hacerlo».
Los sindicatos, como UGT Aragón y CCOO, han hecho un llamado urgente para centrar la atención en los colectivos más vulnerables y han exigido reformas en las políticas de empleo para mejorar las condiciones laborales. La situación es crítica y se necesita una respuesta inmediata para abordar estos problemas estructurales que afectan a miles en la región.
A pesar de las condiciones adversas, CEOE Aragón mantiene que las perspectivas de creación de empleo son favorables, pero advierte que esto dependerá de la evolución económica y las políticas comerciales.
Con la situación laboral en constante cambio, los próximos meses serán cruciales para determinar si Teruel y Aragón pueden revertir esta tendencia negativa y ofrecer oportunidades a los desempleados en la región.
