Un incendio se ha declarado en la medianoche del pasado jueves en la zona de La Alcarria, al sur del núcleo urbano de Lubrín, y podría haber sido causado por un problema en una línea eléctrica. Así lo ha confirmado el alcalde de Lubrín, Domingo Ramos, quien indicó que “lo último que sé es que ha sido por una línea eléctrica que estaba dando chispazos y posiblemente haya sido el motivo del fuego”.
El regidor lamentó la gravedad de la situación, señalando que “nuestro grupo de pronto auxilio ha apagado muchas veces fuegos de menor tamaño, porque somos los primeros en llegar, en cinco o diez minutos, pero este ha sido terrible. A las once de la noche era imposible actuar”. Afortunadamente, en Lubrín no hay peligro inmediato por el avance de las llamas, aunque se están concentrando esfuerzos en los núcleos de Marchal y Campico, donde los medios aéreos ya están intentando dominar el incendio.
Un verano complicado para Lubrín
Este no es el primer incendio que afecta a Lubrín este verano. La semana pasada, se produjo otro incendio en el paraje El Pocico, que requirió la intervención de dos helicópteros semipesados y siete grupos de bomberos forestales, apoyados por tres técnicos de operaciones y dos camiones autobomba. En este incidente, los Bomberos del Levante también colaboraron en las labores de extinción en una zona de matorral escarpado, próxima a cortijos y cultivos.
Además, el 24 de julio, se dio por extinguido otro incendio en el paraje Cortijo El Marchalico, en el que participaron hasta 16 aeronaves y 14 grupos de bomberos forestales. Este verano, las condiciones climáticas han complicado la situación, lo que ha llevado a las autoridades a estar en estado de alerta constante.
Medidas preventivas y despliegue de recursos
El alcalde de Bédar, Angel Francisco Collado, también ha comentado la situación, afirmando que “al final no nos ha afectado” y que tuvieron que desalojar de manera preventiva a unas veinte personas de dos barriadas. “Hemos pasado una noche complicada que nos ha recordado al año 2012 cuando tuvimos aquel gran incendio”, añadió.
Para hacer frente a este nuevo incendio, se ha desplegado un amplio y coordinado dispositivo formado por 11 grupos de bomberos forestales, un técnico de extinción, tres técnicos de operaciones, un técnico de supervisión, un encargado y un agente de medio ambiente. Este equipo del Plan Infoca cuenta con el apoyo de cinco autobombas, una Unidad Médica de Incendios Forestales (UMIF) y una Unidad de Meteorología, además de la colaboración de los Bomberos de Levante.
El teléfono de emergencias 1-1-2 comenzó a recibir avisos de la ciudadanía alertando del incendio alrededor de las 23:00 horas del jueves, lo que llevó a movilizar rápidamente a la Guardia Civil, a la Policía Local y a los efectivos de Bomberos y del Centro Operativo Provincial (COP) Infoca. También se activó al Grupo de Emergencias de Andalucía (GREA) y al servicio provincial de Protección Civil de la Agencia de Emergencias de Andalucía, que se desplazó al Puesto de Mando Avanzado.
La situación sigue siendo crítica, y las autoridades han solicitado a la población que mantenga la precaución en toda la zona mientras se trabajan en las labores de extinción.
