La investigación del asesinato en Solokoetxe ha tomado un giro inesperado tras la confesión de un testigo que asegura haber visto cómo un individuo arrojó lo que podría ser el arma homicida en un contenedor de aceite. Este testimonio ha centrado todos los esfuerzos de las autoridades en la búsqueda de pruebas en la zona, particularmente alrededor del centro de salud Julián de Ajuriaguerra.
Desde esta mañana, equipos de la Ertzaintza y los servicios de limpieza del Ayuntamiento de Bilbao han estado trabajando incansablemente en la recolección de evidencias. Las imágenes de los operarios moviendo los contenedores han circulado rápidamente, mientras uno de ellos fue escuchado comentando: «Vuélcalo y que caiga todo», lo que refleja la urgencia de la situación.
Los investigadores han restringido el perímetro de búsqueda y han intensificado su enfoque en los contenedores cercanos, donde se cree que el sospechoso pudo haber desechado el arma. La colaboración entre diferentes unidades se ha vuelto crucial en este momento, ya que cada minuto cuenta en la recopilación de pruebas que puedan esclarecer el caso.
La comunidad de Solokoetxe está en estado de alerta, y la noticia ha generado una gran conmoción entre los vecinos, quienes esperan respuestas rápidas sobre este trágico suceso. La policía ha instado a cualquier persona que tenga información adicional que se presente y colabore con la investigación.
A medida que se desarrollan los acontecimientos, se espera que las autoridades realicen una actualización sobre las pruebas encontradas y los avances en la identificación del sospechoso. Este caso ha capturado la atención no solo de los residentes locales, sino también de los medios de comunicación, quienes siguen de cerca cada desarrollo en este inquietante suceso.
