Un Boeing 737 MAX 8 de American Airlines realizó una evacuación de emergencia en el Aeropuerto Internacional de Denver tras reportar un posible fallo en el tren de aterrizaje y humo en la cabina. El incidente ocurrió cuando el avión, que se dirigía a Miami, despegó con 173 pasajeros y 6 tripulantes a bordo.
Los pasajeros fueron evacuados rápidamente por los toboganes inflables, muchos de ellos tropezando al llegar a la pista. La Administración Federal de Aviación (FAA) confirmó que el problema estaba relacionado con una llanta del tren de aterrizaje, lo que llevó a la decisión de evacuar.
Los bomberos del aeropuerto respondieron de inmediato y extinguieron un pequeño incendio en la aeronave, sin que se registraran heridos graves. Sin embargo, un pasajero fue trasladado al hospital con una lesión menor, y cinco personas fueron evaluadas en el lugar, recibiendo atención sin necesidad de hospitalización.
La aerolínea ha decidido retirar el avión de servicio para una inspección exhaustiva por parte de su equipo de mantenimiento. Las autoridades locales han comenzado a investigar el incidente para determinar las causas exactas del fallo.
Este suceso resalta la importancia de la seguridad en los vuelos comerciales y cómo situaciones de emergencia pueden desarrollarse de forma imprevista. Se espera que se brinden más detalles en las próximas horas, mientras los pasajeros evacuados son asistidos y el aeropuerto normaliza sus operaciones.
