La Junta de Andalucía ha anunciado un **plan de acción integral** para abordar la crisis de los **cribados de cáncer** que ha impactado a la comunidad, especialmente tras los recientes fallos en el cribado de **cáncer de mama**. Este anuncio crítico fue realizado por el consejero de **Presidencia**, **Antonio Sanz**, quien confirmó que el **Consejo de Gobierno** se reunirá el **próximo miércoles, 15 de octubre**, para aprobar nuevas medidas que incluirán los cribados de **cáncer de colon** y **cuello de útero**.
Este movimiento sigue a la dimisión de la consejera de **Salud y Consumo**, **Rocío Hernández**, lo que ha puesto al gobierno de **Juanma Moreno** bajo una intensa presión. Sanz subrayó que la Junta quiere «abordar la situación con carácter integral» y garantizar la seguridad de las personas afectadas, asegurando que no se repitan estos errores.
El nuevo plan se basa en el reciente plan de choque para el cribado de cáncer de mama, y se expandirá para incluir iniciativas específicas para el cáncer de colon y cuello uterino. En cuanto al cáncer de colon, se contempla un **refuerzo de los sistemas de información**, un aumento en el número de profesionales dedicados, y campañas de sensibilización ciudadana. También se mejorará la coordinación entre niveles asistenciales y se acortarán los plazos para realizar las colonoscopias necesarias.
Sanz también destacó que el **Ministerio de Sanidad** incluyó el cribado de cáncer de cuello uterino en 2019 en la cartera común de servicios del **Sistema Nacional de Salud**, y que Andalucía trabaja para cumplir los hitos establecidos, con un objetivo de alcanzar una cobertura del **90% en 2029**.
La oposición, sin embargo, ha criticado este plan. **María Ángeles Prieto**, secretaria de Salud del **PSOE-A**, ha calificado el plan de choque como «plagado de mentiras» y ha acusado al gobierno de intentar ocultar la realidad de la crisis sanitaria actual.
Este anuncio no solo es crucial para la salud pública en Andalucía, sino que también marca un punto de inflexión en la gestión sanitaria de la región, que ha sido objeto de un intenso escrutinio. La comunidad espera con ansiedad las decisiones que se tomen el **15 de octubre**, ya que estas afectarán a miles de personas en riesgo.
A medida que se aproximan las fechas clave, la atención se centra en cómo la Junta implementará estas medidas y si logrará restaurar la confianza en su capacidad para manejar los programas de detección de cáncer, vitales para la salud de la población andaluza.
