Una niña de tan solo ocho años ha sido víctima de un grave abuso en la localidad almeriense de El Ejido, concretamente en el núcleo de Las Norias de Daza. El suceso tuvo lugar el martes por la noche, alrededor de las 20:00 horas, cuando la menor se encontraba cenando en un bar cercano al negocio familiar de sus padres.
Según fuentes de la investigación, el agresor, un hombre adulto de origen marroquí, aprovechó un momento de descuido para acercarse a la pequeña y convencerla de que saliera del establecimiento con la excusa de enseñarle algo en su teléfono móvil. Una vez fuera, varios clientes del local observaron cómo el individuo mantenía un comportamiento inapropiado con la menor, lo que provocó una reacción inmediata.
Intervención rápida de testigos y fuerzas de seguridad
Uno de los testigos intervino rápidamente y logró retener al agresor hasta la llegada de los agentes de la Guardia Civil y de la Policía Local, que procedieron a su detención. Los responsables del bar alertaron de inmediato tanto a los padres de la niña como a las autoridades. El agresor ha pasado a disposición judicial, según han confirmado fuentes policiales.
La intervención de los clientes y la rápida actuación de las fuerzas de seguridad evitaron que los hechos fueran aún más graves. El incidente ha generado una gran conmoción en la barriada de Las Norias y ha reavivado el debate sobre la falta de recursos policiales en la comarca del Poniente.
Reacciones y preocupación en la comunidad
Desde la asociación profesional Jucil, mayoritaria en la Guardia Civil, se ha reconocido la profesionalidad de los agentes que participaron en la detención, subrayando «su compromiso constante con la protección de los menores y la seguridad ciudadana». Este suceso pone de manifiesto la necesidad de fortalecer los recursos para garantizar la seguridad de los más vulnerables en la comunidad.