En el corazón de los Picos de Europa, se encuentra Camarmeña, una aldea que cuenta con apenas doce habitantes. Este pequeño rincón de Asturias sorprende a aquellos que se aventuran a recorrer su sinuosa carretera, ofreciendo una experiencia única en un entorno natural incomparable.
Situada a 426 metros sobre el nivel del mar, Camarmeña se abre ante los visitantes con una vista impresionante del emblemático Picu Urriellu, conocido popularmente como Naranjo de Bulnes. Este pico, que alcanza los 2 519 metros, es un verdadero desafío para los alpinistas, con una pared vertical de 550 metros en su Cara Oeste.
Historia y tranquilidad en un entorno natural
La historia de Camarmeña se remonta a antes del año 800, y su nombre está vinculado a las aguas que manan de la tierra en esta región. Pasear por sus calles empedradas, admirar la iglesia medieval de San Pedro y escuchar el murmullo del río que rodea el pueblo es un viaje al pasado, donde la vida transcurre de manera pausada y en armonía con la naturaleza.
Este enclave asturiano permite a los visitantes disfrutar de actividades al aire libre como el senderismo, que se complementa a la perfección con la oferta gastronómica local. Entre las delicias que se pueden degustar, destacan la tradicional fabada asturiana y quesos de renombre como el Cabrales y el Gamoneu.
Un destino que evoca los Alpes Suizos
Camarmeña se presenta como un tesoro escondido donde se puede experimentar la grandeza de los Alpes Suizos sin salir de España. La calma y la serenidad que impregnan cada rincón del pueblo, junto con el imponente paisaje montañoso, hacen que cada visita sea memorable.
Descubrir Camarmeña es más que visitar un lugar; es sumergirse en una experiencia auténtica que conecta con la esencia de Asturias. Este pueblo es ideal para quienes buscan desconectar de la rutina, descansar y reencontrarse con la naturaleza en su estado más puro. La combinación de su historia, su entorno natural y su gastronomía de primer nivel hacen de este lugar un destino que merece la pena recorrer con tranquilidad.