La competición anual para determinar cuál es el pueblo con la iluminación navideña más hermosa de España ha comenzado. Desde esta semana y hasta el 15 de diciembre de 2025, los ciudadanos podrán votar por su candidato favorito entre los diecisiete pueblos seleccionados, uno por cada comunidad autónoma. Este evento, organizado por Ferrero Rocher, busca difundir el espíritu navideño a lo largo del país y atraer la participación de miles de personas.
En una rueda de prensa celebrada recientemente, el presentador Jesús Vázquez actuó como anfitrión, destacando una importante novedad en esta edición. A diferencia de años anteriores, donde solo cinco pueblos competían, este año se ha ampliado el número a diecisiete, lo que permite una representación más diversa y rica en tradiciones y patrimonio local. “Se ha tratado de poner en valor la diversidad geográfica, además de la riqueza del patrimonio, nuestras tradiciones y el talento local”, afirmaron desde la marca.
Fases de votación y emoción en la participación
La votación se llevará a cabo en varias fases, donde los pueblos menos votados serán eliminados paulatinamente. En la fase final, solo quedarán dos localidades que se disputarán el título. Este formato promete mantener a los votantes en vilo y generar un ambiente de competencia emocionante. Jesús Vázquez comentó: «Es algo realmente emocionante; la gente te recibe con los brazos abiertos y te sientes como en casa».
La participación en esta iniciativa no solo se traduce en un concurso, sino en una celebración de la alegría y la unidad que representa la Navidad. Los habitantes de cada pueblo están motivados para mostrar su mejor cara y atraer a visitantes y votantes, lo que también repercute positivamente en la economía local.
El impacto del evento en las comunidades
La elección del pueblo más iluminado no solo es un evento festivo, sino que también fomenta el turismo y el comercio en las localidades participantes. Con cada voto, los ciudadanos contribuyen a que su pueblo brille más intensamente, lo que puede traducirse en un aumento del interés turístico durante la temporada navideña.
En resumen, la competición de iluminación navideña de Ferrero Rocher se ha convertido en una tradición entrañable que no solo embellece los pueblos, sino que también une a las comunidades en torno a un objetivo común: celebrar la Navidad con alegría y creatividad. La cuenta atrás para el anuncio del ganador ya ha comenzado y la expectación es palpable en cada rincón del país.
