La 23.ª edición de Eurovisión Junior ha llegado a su fin y, como era de esperar, ha dejado una huella significativa en la memoria de los amantes de la música. Francia, representada por Lou Deleuze con su canción Ce monde, se coronó campeona en la gran final que tuvo lugar el 24 de septiembre de 2025 en el Pabellón de Gimnasia de Tiflis, Georgia. La gala, que se extendió más allá de lo habitual, se caracterizó por las impresionantes actuaciones de jóvenes artistas, donde el talento fue el verdadero protagonista.
España fue representada por Gonzalo Pinillos con su emotiva canción Érase una vez (Once Upon a Time), logrando un destacado quinto puesto. Este resultado marca un regreso triunfal al top 5, posicionando a España en una mejor posición que en la edición del año pasado. La actuación de Gonzalo, que exploró una narrativa inspirada en cuentos infantiles, fue elogiada por su creatividad y la conexión con el jurado, aunque recibió un apoyo algo menor del público.
Victoria y Récord para Francia
Francia, con su cuarta victoria en solo seis ediciones de Eurovisión Junior, ha alcanzado un hito notable, igualando a Georgia como el país con más triunfos en la historia del certamen. Lou Deleuze, con su interpretación de Ce monde, acumuló 248 puntos, lo que la coloca en la segunda mejor puntuación histórica del concurso, solo superada por Vicky Gabor de Polonia en 2019. La victoria fue contundente, ya que Francia dominó la clasificación del jurado con un total de 152 puntos, aventajando en 31 puntos a su más cercano competidor, Ucrania, que quedó en segundo lugar.
En esta edición, la delegación francesa no solo se destacó por la calidad vocal de Lou, sino también por la puesta en escena, que evocaba un estilo similar al de Voilà de Barbara Pravi, que ganó el festival en 2021. Además, su éxito en el televoto, donde quedó segunda, muestra la popularidad de su propuesta entre los espectadores.
Con este triunfo, Francia reafirma su posición como una de las potencias recientes en Eurovisión Junior. Sin embargo, a pesar de su éxito, la televisión francesa decidió no organizar Eurovisión Junior 2024, argumentando que el país había albergado el evento en dos ocasiones en poco tiempo y que su enfoque estaba en los próximos Juegos Olímpicos.
La historia de Francia en este certamen es impresionante: en sus nueve participaciones desde su regreso en 2018, su único resultado negativo fue un sexto puesto en 2004. Desde entonces, ha acumulado cuatro victorias, una medalla de plata, una de bronce, y varios puestos destacados, consolidando su reputación en este festival juvenil.
El Desempeño de España
La actuación de España, que cerró la gala con 152 puntos (98 del jurado y 54 del televoto), fue una de las más memorables del evento. Gonzalo Pinillos mostró no solo su talento vocal, sino también una puesta en escena cautivadora, coreografiada por Mónica Peña y con el diseño escénico de Juan Sebastián. A pesar de que el televoto posicionó a España en una octava posición, su éxito en el jurado refuerza la idea de que el país está en el camino correcto para seguir compitiendo en el certamen.
Gonzalo, emocionado por el resultado, expresó:
“Estoy muy agradecido. No me esperaba ni el puesto 5. Todos queremos ganar, pero un quinto puesto es increíble y lo importante es todo lo que hemos vivido esta semana y haberme podido subir a ese escenario.”
Este logro reafirma el buen momento de España en el festival, recordando su única victoria en 2004 con María Isabel y su éxito posterior en ediciones recientes.
A lo largo de los años, España ha mostrado un crecimiento significativo en Eurovisión Junior, con un total de dos medallas de plata y un bronce en su trayectoria. La representación de Gonzalo se suma a una lista de actuaciones destacadas que han puesto al país en el mapa del festival juvenil, dejando a los aficionados con la esperanza de un futuro brillante.
El Panorama Competitivo
Además de Francia y España, otros países han demostrado su destreza en Eurovisión Junior. Ucrania, con Sofia Nersesian y su canción Motanka, obtuvo la segunda posición con 177 puntos, destacándose en la votación online. Georgia, jugando en casa, y Armenia también hicieron un excelente trabajo, ocupando el tercer y cuarto lugar respectivamente, lo que demuestra que estos países saben cómo navegar en el competitivo mundo de Eurovisión Junior.
El festival, que combinó tradición y modernidad en su espectáculo, fue un deleite para los espectadores. Presentado por David Aladashvili y Liza Tsiklauri, la gala homenajeó la cultura georgiana y celebró la música como un medio para unir a los jóvenes talentos de Europa.
En conclusión, la 23.ª edición de Eurovisión Junior no solo ha dejado un sabor a victoria para Francia y un honorable quinto puesto para España, sino que también ha reafirmado la importancia de la música en la unión de culturas y en el fomento del talento juvenil. Con miras al futuro, España y otros países ya se preparan para la próxima edición, esperando seguir sumando logros en este esperanzador festival musical.
