Florentino Pérez, presidente del Real Madrid, ha mostrado un gran empeño en destacar la salud financiera del club, y lo ha logrado en buena medida. Este domingo, durante la asamblea ordinaria de compromisarios, se examinarán las cuentas más recientes del club (10:00 horas, en primera convocatoria). Sin embargo, los expertos advierten que es necesario analizar estas cifras con un enfoque crítico, ya que las empresas suelen omitir detalles importantes en su narrativa.
Uno de los puntos que ha suscitado discusión es la decisión del club de separar las cifras relacionadas con la remodelación del estadio de las cuentas ordinarias. Según Jorge Martín Magdalena, profesor de la Universidad Pontificia Comillas, «esta deuda afecta al conjunto del club», y aislarla puede dar una impresión engañosa sobre la situación financiera real del Madrid.
Los números son impactantes. El Real Madrid ha alcanzado 1.185 millones de euros en ingresos, un récord que supera en 111 millones el ejercicio anterior. Luis Carlos Sánchez, profesor de la Universidad de Oviedo, señala que «es increíble que después de haber pasado los mil millones haya logrado un crecimiento de más del 10%». Sin embargo, el análisis de estos ingresos revela que el porcentaje proveniente de los socios ha disminuido, a pesar del aumento en la recaudación del nuevo estadio. La cuestión radica en la capacidad de generar ingresos de los no abonados y los asistentes VIP.
«Si el Madrid quisiera podría incrementar el precio de los abonos y meter más turistas, pero si lo hace podría haber un levantamiento»,
dice Luis Carlos Sánchez.
A medida que el club se aleja de la dependencia de los socios, la importancia de los patrocinadores se hace evidente. Esta temporada, el número de patrocinadores ha aumentado de 406 a 481, lo que ha contribuido significativamente a los ingresos. Comparando con hace cuatro años, cuando había solo 290 patrocinadores, el crecimiento es notorio.
Sin embargo, no todo es positivo. El economista Héctor Mohedano señala que el incremento en las cuentas debe ser matizado, ya que parte de este aumento se debe a un ajuste con Providence, una empresa que ha colaborado con el Madrid durante años. Aunque este ajuste es contablemente válido, puede inflar las cifras de manera poco transparente.
Un factor clave en el resultado positivo de este año son los 42 millones de euros obtenidos del Mundial de Clubes, un torneo que, aunque ha aportado beneficios, también implica gastos. «Es cierto que ese ingreso no es recurrente, pero tampoco lo es ganar la Champions», afirma Luis Carlos Sánchez. Sin este ingreso extraordinario, el club podría estar enfrentando pérdidas, aunque los economistas advierten que no se puede simplemente restar esta cifra de las cuentas, ya que su ausencia habría llevado a una reorientación de las finanzas del Madrid.
El estadio también ha mostrado resultados positivos en términos de explotación comercial, con un aumento del 38% esta temporada y más de un 70% respecto a 2019. Sin embargo, el club reconoce que existen oportunidades sin explotar, especialmente en el ámbito de la restauración y en la organización de conciertos, que están en pausa debido a problemas de ruido.
Los ingresos provenientes de eventos y conciertos han crecido de 8,5 millones a 15,4 millones, incluyendo casi 100 eventos celebrados en el Bernabéu. Esta actividad muestra que los conciertos podrían representar unos «ingresos adicionales muy importantes y diferenciales», señala Sánchez, lo que podría frenar el crecimiento del club si no se gestionan adecuadamente.
A pesar de los impresionantes ingresos, el verdadero desafío reside en la gestión de gastos. La contención en el gasto de la plantilla es notable: «El gasto de todo el personal solo representa el 44% de la cifra de negocio», dice Martín Magdalena. Este control del gasto es una ventaja competitiva, especialmente dado que la UEFA requerirá que los clubes se mantengan por debajo del 70% de gastos en plantilla la próxima temporada.
Las sombras del endeudamiento
Sin embargo, los expertos advierten sobre un problema que podría afectar al club en el futuro: la deuda. «La parte sombría es que hay un fuerte endeudamiento por las obras del estadio», señala Sánchez. El Madrid ha optado por financiar su crecimiento a través del endeudamiento, lo que plantea un riesgo financiero si no se cumplen los objetivos de ingresos y caja. La deuda financiera consolidada ha alcanzado un récord de 1.560 millones de euros, mientras que el pasivo total, incluyendo todas las obligaciones, se eleva a 2.200 millones.
A pesar de estos números, el club ha logrado un EBITDA de más de 240 millones de euros y un resultado neto de 24 millones de euros, aumentando su patrimonio neto a casi 600 millones de euros. Sin embargo, la pérdida negativa de 357 millones de euros en el fondo de maniobra representa un riesgo en el corto plazo. Los expertos están divididos sobre si tener un fondo negativo es siempre negativo; Sánchez sugiere que no siempre implica una situación delicada, mientras que Magdalena advierte que es un área a vigilar debido a las exigencias del ‘fair play financiero’
A pesar de la aparente estabilidad financiera, vivir endeudado «es vivir en el alambre». Aunque la salud financiera del club es sólida, cualquier cambio en las circunstancias podría disparar problemas debido a esta pesada carga. Las finanzas del Madrid son siempre una parte crucial de su narrativa, especialmente en un momento en el que se discute un cambio de sociedad.
