Un grupo de restauradores de Barcelona ha dado un paso significativo al presentar este martes una nueva entidad que competirá con el Gremio de Restauración en la representación de los empresarios de bares, restaurantes y cafeterías de la ciudad. La nueva asociación, denominada Barcelona Restauración, ha sido creada en colaboración con Barcelona Comerç, la organización que defiende los intereses de los ejes comerciales de los barrios. El empresario Salva Vendrell será el presidente de esta nueva entidad.
Vendrell había renunciado previamente a su puesto como presidente del Gremio de Restauración en febrero de 2024, tras apenas un año en el cargo. Hasta el momento, no se han revelado las razones de su dimisión, que fue aceptada por la junta del Gremio, la cual decidió renovar la confianza en su director, Roger Pallarols, por un periodo adicional de diez años. Durante la presentación de Barcelona Restauración, que tuvo lugar en el teatro Molino, Vendrell subrayó la necesidad de que la restauración tuviera “una voz propia en los ejes comerciales” y afirmó: “Merecemos un espacio específico. Barcelona Restauración tiene una vocación de servicio. No competimos con nadie ni nos solaparemos. Se trata de sumar y crecer juntos”.
El apoyo de los establecimientos
La nueva asociación ya cuenta con el respaldo de 700 establecimientos en Barcelona, lo que demuestra un considerable apoyo en el sector. Vendrell destacó que no comenzaban desde cero, ya que contaban con “20 años de experiencia acumulada en trabajo de proximidad”. “Hablamos de personas, de proyectos familiares, de comunidad”, añadió. Este enfoque en el negocio local y de barrio se presenta como una de las principales prioridades de Barcelona Restauración.
En el mismo día de la presentación, el Gremio de Restauración organizó un evento en colaboración con Foment, Pimec y Barcelona Oberta, donde se discutió la futura prohibición de fumar en las terrazas de bares y restaurantes. Durante este acto, Pallarols negó que la nueva entidad supusiera una competencia para el Gremio, señalando que “no es un gremio, es la Fundación Barcelona Comerç”, que está subvencionada con fondos públicos y que siempre ha defendido la coexistencia de comercio y restauración en sus ejes.
Conflicto de intereses
Pallarols también cargó contra Vendrell, acusándolo de utilizar organizaciones patronales para construir su “marca personal”. “Vendrell me recuerda a la figura de Enric Marco (el impostor que afirmó falsamente ser víctima de los nazis). Para Marco, la CNT, las asociaciones de padres o los campos de concentración eran la excusa: lo único que importaba era salir en la foto”, afirmó Pallarols, sugiriendo que Vendrell estaba más interesado en la notoriedad personal que en los intereses del sector.
Por su parte, Vendrell optó por no responder a las acusaciones de su ex compañero en el Gremio, limitándose a afirmar que Barcelona Restauración tendrá un estilo propio. Aunque admitió que Pallarols le ha faltado al respeto, concluyó: “Cada uno tiene su estilo. No entraré en este debate. Llevamos más de un año trabajando en esta propuesta que no es ninguna pataleta. Es una entidad con vida propia. En el futuro habrá vínculos que nos harán trabajar juntos”. Vendrell considera que el Gremio puede no llegar a todos los puntos de los ejes de barrios y confía en que con Barcelona Restauración se “alcanzarán objetivos muy concretos”.
Este nuevo escenario en la restauración barcelonesa marca un momento crucial en la organización del sector y plantea preguntas sobre la futura representación de los intereses de los restauradores en la capital catalana.
