El colombiano Manuel Turizo ofreció un espectáculo inolvidable el pasado sábado en el Anexo Estadio Antonio Domínguez Alfonso de Arona, donde colgó el cartel de “No hay billetes” en el marco de su 201 World Tour. La velada, organizada por Osadía Music Fest y patrocinada por el Ayuntamiento de Arona, atrajo a cientos de fanáticos que comenzaron a llegar al recinto desde las 18:00 horas, disfrutando de diversas actividades previas y de una oferta gastronómica de foodtrucks.
A las 21:00 horas, las luces se apagaron y una proyección dio inicio al concepto central del tour, “Apartamento 201”, que también es el título de su cuarto álbum. Con su inconfundible voz, Turizo conectó instantáneamente con el público, que respondió con gritos y luces de móviles desde el primer acorde.
Un viaje musical a través de sus éxitos
Durante casi dos horas, el artista presentó un repertorio que combinó sus nuevos temas con grandes himnos que han marcado su carrera. Canciones como “El Merengue”, “Una Lady como tú”, “Qué Pecao” y “Vagabundo” fueron coreadas por un público entregado, que llenó cada rincón del recinto. La escenografía y los visuales recrearon el ambiente de su apartamento, un espacio simbólico que refleja la esencia personal y emocional de esta nueva etapa artística.
La calidad del sonido, la iluminación y la puesta en escena evidenciaron la madurez de un espectáculo meticulosamente preparado, diseñado para conectar no solo con los oídos, sino también con las emociones de los asistentes. El concierto alcanzó su clímax con “La Bachata”, su mayor éxito global, que desató una euforia colectiva y dejó al público cantando incluso después de que Turizo abandonara el escenario.
Un evento destacado en el calendario musical canario
Este paso de Manuel Turizo por Arona se ha consolidado como uno de los grandes eventos musicales del año en Canarias. Con una gira nacional que ha logrado afianzar al artista colombiano como una de las figuras más queridas y versátiles de la música latina actual, el 201 World Tour finalizará su recorrido por España con un último concierto en Gran Canaria.
La conexión emocional y el alto nivel de producción de este concierto han dejado una huella imborrable en los asistentes, que esperan con ansias futuros eventos de este calibre. La noche mágica en Arona no solo ha sido un triunfo del artista, sino también una celebración de la música latina que sigue resonando en el corazón de sus aficionados.
