Un estudio reciente liderado por investigadores del Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana (CENIEH) en Burgos revela que el uso reiterado de la técnica de microtomografía computarizada (micro-CT) puede causar daños irreversibles en los fósiles. Publicado en la revista Radiocarbon, este trabajo pone de manifiesto cómo esta herramienta, considerada en principio no destructiva, afecta negativamente la conservación de los restos fósiles.
La micro-CT ha sido una de las técnicas más utilizadas por paleontólogos y paleoantropólogos en las últimas décadas debido a su capacidad para acceder a la estructura interna de los fósiles y reconstruirlos en tres dimensiones sin causar daños visibles. Como explica la investigadora Laura Martín-Francés, coautora del estudio, «esta técnica permite acceder a la estructura interna de los fósiles y reconstruirlos en 3D sin causar daños visibles», lo que ha llevado a su amplia adopción en la comunidad científica.
Sin embargo, el estudio demuestra por primera vez una relación directa entre el uso del micro-CT y la reducción de la cantidad de colágeno en huesos y dientes, tanto fósiles como modernos. Este hallazgo sugiere que la micro-CT puede dificultar futuros análisis científicos de estos materiales, limitando la posibilidad de obtener información valiosa sobre la evolución y la biología de las especies.
Impacto de la técnica en la conservación
La micro-CT utiliza radiaciones electromagnéticas de alta energía, conocidas como rayos X, que son capaces de inducir cambios a nivel microscópico en los materiales con los que interactúan. Según Mathieu Duval, investigador principal del estudio, «los resultados de nuestro estudio no constituyen una gran sorpresa, porque ya se sabía que esta técnica podría favorecer la degradación de proteínas en huesos y dientes, aunque nunca se había demostrado experimentalmente hasta ahora».
El estudio, fruto de una colaboración internacional con la Universidad de Oxford en el Reino Unido, señala que el uso sistemático de la micro-CT debe ser abordado con precaución. Los autores no proponen la prohibición de la técnica, sino que alertan sobre los riesgos asociados a su uso excesivo y recomiendan prudencia. «Esta técnica sigue ofreciendo más ventajas que inconvenientes para analizar los fósiles, por lo cual no se trata de prohibirla. Simplemente queremos advertir de los riesgos del uso sistemático e ilimitado de escaneos micro-CT con rayos X en paleoantropología», concluyen los investigadores.
El hallazgo de este estudio es relevante, ya que enfatiza la necesidad de un uso responsable de las herramientas tecnológicas en la investigación científica, especialmente en campos tan delicados como la paleontología y la conservación de fósiles.
