La Diputación de Huelva ha conseguido este año un «mayor control» de las plagas de mosquitos en la provincia, gracias al uso de tecnologías avanzadas y a la autorización para realizar fumigaciones en momentos y zonas específicas de parajes protegidos, como el Parque Nacional de Doñana y Marismas del Odiel. Así lo ha afirmado el presidente de la Diputación, David Toscano, en una reciente entrevista con Europa Press.
Toscano destacó que la provincia cuenta con un Servicio de Control de Plagas reconocido a nivel nacional por su eficacia, subrayando que «lleva muchos años trabajando» y posee un profundo conocimiento sobre el tema. En este contexto, explicó que, aunque «eliminar el mosquito es imposible», es factible mantener sus niveles en cifras tolerables. «Después de las mareas de Santiago suele haber un repunte», advirtió.
Innovación tecnológica en el control de plagas
El presidente de la Diputación también mencionó la incorporación de nuevas tecnologías en los métodos de fumigación, indicando que «los drones son ya algo habitual» en las operaciones diarias. «Estamos intentando integrarlos en el servicio de fumigación de los mosquitos», añadió, y destacó un proyecto que permitirá monitorizar en tiempo real factores como las mareas y la temperatura en diferentes localidades.
Además, Toscano hizo hincapié en el establecimiento de un servicio de vigilancia para el control de mosquitos vectores de la fiebre del Nilo occidental, que permite realizar muestreos en los municipios onubenses. Este sistema clasifica las zonas en niveles de riesgo, que oscilan entre 2 y 4, de acuerdo con las pautas del Plan Territorial de Vigilancia y Control Integral de Vectores de la FNO para el año 2025.
«Contamos con una red de estaciones de trampeo que está siendo muy útil, especialmente para vigilar y controlar la fiebre del Nilo», comentó Toscano, quien subrayó la colaboración con los ayuntamientos en la gestión de estas plagas, afirmando que «estamos ayudando en todo lo que podemos».
Fumigaciones en zonas protegidas
Otro aspecto importante que resaltó el presidente es la capacidad de realizar fumigaciones en zonas protegidas, algo que históricamente había sido complicado. «Este año se ha conseguido fumigar en Marismas del Odiel y en Doñana, en momentos específicos», aseguró Toscano, quien añadió que, hasta el momento, «los niveles están bastante controlados». Sin embargo, advirtió que un aumento repentino de las temperaturas o una marea inusual podría alterar la situación.
En cuanto a las fumigaciones en parajes naturales, Toscano señaló que el éxito de estas operaciones depende del año y de las condiciones meteorológicas. «El año pasado, por ejemplo, tuvimos un repunte importante de mosquitos debido a una gran marea coincidente con la época de anidamiento», concluyó.
