El gigante bancario Citigroup mantiene una visión optimista sobre el rally de las acciones vinculadas a la inteligencia artificial (IA), a pesar de las recientes correcciones en el mercado. Según sus estrategas, la volatilidad observada no señala el final de una posible burbuja, sino que forma parte de un ciclo que aún puede generar ganancias significativas para los inversores.
Una burbuja aún rentable
Dirk Willer, responsable global de estrategia macro y asignación de activos de Citigroup, afirmó que las fluctuaciones en el comercio de inteligencia artificial no deben ser interpretadas como el estallido inminente de una burbuja. “Aunque el mercado de acciones estadounidense ha activado nuestra definición de burbuja, lo que genera ciertos riesgos, es importante destacar que las burbujas suelen ser inicialmente muy rentables”, escribió Willer en una nota a clientes enviada el jueves. Por lo tanto, el estratega advierte que no se debe dar excesiva importancia a los recientes tropiezos en IA, ya que es poco probable que anuncien el fin de la burbuja.
Willer explicó que el equipo de análisis de renta variable de Citigroup está priorizando actualmente el seguimiento de los beneficios empresariales por encima del riesgo de colapso de la burbuja. Además, señaló que el pico de una burbuja puede estimarse con mayor antelación mediante indicadores de liquidez y análisis técnico, que suelen ofrecer señales de alerta más tempranas que el panorama de ganancias.
Contexto del mercado tecnológico
Estas declaraciones llegan en un contexto de preocupación por la posible sobreinversión en inteligencia artificial, lo que ha presionado a la baja a los principales valores tecnológicos. En noviembre, el Nasdaq Composite, índice de fuerte peso tecnológico, cayó un 1,5%, interrumpiendo una racha de siete meses consecutivos al alza. A pesar de esta corrección mensual, el Nasdaq se encamina a cerrar 2025 con una subida superior al 22% y cotiza muy cerca de su máximo histórico de mediados de noviembre, cuando alcanzó los 23 958 puntos. Al cierre de la sesión del viernes, el índice se situaba en 23 569,70 puntos, con un avance diario del 0,28%.
Más allá de la temática de inteligencia artificial, Willer destacó que la perspectiva de una política monetaria más laxa representa un viento de cola adicional para la renta variable. Según el experto, la Reserva Federal está “orquestando otro aterrizaje suave” mediante la reducción de los tipos de interés. Los futuros de fondos federales reflejan que el mercado descuenta casi con total certeza un recorte de 25 puntos básicos en la última reunión del año la próxima semana, lo que dejaría el rango objetivo de la tasa de fondos federales entre 3,50% y 3,75%, de acuerdo con la herramienta CME FedWatch.
No obstante, Willer incluyó una salvedad de cara al próximo año. Históricamente, los años con elecciones congresionales de medio término —como las programadas para noviembre de 2026— no han sido favorables para el comportamiento de las acciones a largo plazo. Este factor podría introducir mayor volatilidad o presiones bajistas una vez superada la euforia actual del mercado.
