La educación es un pilar esencial para el progreso social y económico de cualquier nación. Un reciente informe ha revelado que Chile lidera el ranking en calidad educativa en América Latina, marcando un cambio significativo en el panorama educativo de la región. El Índice de Resultados Escolares (IRE) ha sido clave para identificar este liderazgo, midiendo la proporción de adolescentes de 15 años que completan su educación sin repeticiones ni abandonos.
Chile, el nuevo líder educativo
El IRE ha posicionado a Chile como el país con el mejor sistema educativo de América Latina. Según el informe, el 38 % de los estudiantes logra cumplir con los estándares establecidos, finalizando su escolaridad a tiempo y con conocimientos adecuados en Lengua y Matemáticas. Además, la cobertura escolar se mantiene sólida, alcanzando al 95 % de los jóvenes hasta los 17 años. Este resultado es reflejo de un trabajo constante en políticas educativas y una estructura escolar que asegura no solo la asistencia, sino también un aprendizaje efectivo para una gran parte del alumnado.
Desafíos en la educación argentina
En contraste, Argentina ha experimentado una pérdida de terreno en términos de calidad educativa. A pesar de contar con una alta cobertura escolar del 97 %, los resultados del IRE indican una alarmante disminución en los niveles de aprendizaje. Actualmente, solo 22 de cada 100 estudiantes cumplen con los parámetros del índice, lo que representa un descenso respecto a 2008, cuando la cifra era del 26 %. Este estancamiento se debe a que muchos alumnos asisten a clases, pero no logran alcanzar los estándares mínimos en Lengua y Matemáticas, según evaluaciones internacionales como PISA.
El informe comparó a ocho países latinoamericanos: Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México, Paraguay, Perú y Uruguay. Los resultados reflejan diferencias significativas en el rendimiento educativo: Chile (38), Uruguay (36), Perú (28), México y Brasil (23), Argentina (22), Colombia (19) y Paraguay (11).
El estudio concluye que, aunque la cobertura educativa en América Latina ha mejorado, la calidad y el aprendizaje siguen siendo los grandes desafíos para los sistemas educativos de la región.
