jueves, octubre 30, 2025

¿Por qué duele la cabeza al beber agua fría en verano?

Un sorbo de agua helada puede desencadenar un dolor de cabeza intenso conocido como "brain freeze".
por 19 agosto, 2025
Lectura de 2 min

El verano trae consigo un calor abrumador, y tras un día de actividad intensa, un vaso de agua fría parece el alivio perfecto. Sin embargo, muchas personas experimentan un dolor repentino y agudo en la cabeza tras beberla, fenómeno conocido como «brain freeze» o dolor de cabeza por frío. Este malestar, aunque fugaz, ha llamado la atención de médicos e investigadores que intentan desentrañar sus causas y cuándo debe considerarse motivo de preocupación.

El mecanismo del «brain freeze»

Este fenómeno, cuyo nombre técnico es «neuralgia del ganglio esfenopalatino», ocurre cuando un elemento frío entra en contacto rápido con el paladar o la parte posterior de la garganta. Esta rápida variación de temperatura provoca una contracción seguida de una dilatación súbita de los vasos sanguíneos, en especial de la arteria cerebral anterior. Este proceso genera un aumento de presión en el cráneo, que activa los receptores del dolor en las meninges y envía la señal al cerebro a través del nervio trigémino, que también está implicado en otros tipos de cefaleas, como la migraña.

La sensación es abrupta y peculiar: un dolor que se asemeja a una descarga eléctrica en la frente, que dura pocos segundos. Aunque puede resultar alarmante, este dolor es una reacción del cuerpo que busca protegerse de cambios térmicos bruscos. Investigaciones como la del Dr. Jorge Serrador en 2012 han demostrado que este dolor se origina de la dilatación repentina de la arteria cerebral anterior, resaltando así el funcionamiento del sistema nervioso ante estímulos extremos.

¿Quiénes son más propensos a sufrirlo?

Cualquier persona puede experimentar este tipo de dolor, pero aquellos que sufren de migrañas parecen ser más susceptibles. Según el ICE-H Study, publicado en el British Medical Journal, la velocidad con la que se consume un alimento frío influye directamente en la aparición del «brain freeze». Por ejemplo, comer helado rápidamente puede duplicar las probabilidades de sufrir esta cefalea.

Un estudio posterior reveló que las mujeres con migraña activa tienen el doble de riesgo de experimentar dolor de cabeza al beber agua fría en comparación con aquellas sin antecedentes. Este fenómeno puede atribuirse a una mayor sensibilidad del sistema nervioso central, especialmente a través de los receptores TRPM8, que detectan el frío y pueden estar hiperactivos en personas con migrañas.

Cuando el dolor puede ser preocupante

Aunque el «brain freeze» suele ser inofensivo, existen señales que indican que se debe consultar a un médico. Si el dolor se prolonga más de cinco minutos, aparece con frecuencia o se acompaña de síntomas como vértigo, pérdida de equilibrio, visión borrosa o dificultades para hablar, es crucial buscar atención médica. Las clínicas como la Cleveland Clinic o la Mayo Clinic advierten que este tipo de dolor no debe ser incapacitante ni insoportable; si lo es, es necesario descartar otras condiciones subyacentes.

Los profesionales utilizan herramientas como la lista de señales de alarma SNNOOP10 para identificar dolores de cabeza que requieren evaluación urgente. Entre estos están los dolores de cabeza de inicio explosivo, aquellos asociados a actividad física intensa, fiebre, rigidez de cuello, cambios mentales o antecedentes familiares de aneurismas o tumores cerebrales.

Prevención y tratamiento

Para la mayoría de las personas, evitar el «brain freeze» es sencillo. Beber agua fría a pequeños sorbos, no tragar helado de golpe, calentar ligeramente la comida fría con la lengua antes de ingerirla o presionar la lengua contra el paladar para igualar la temperatura son medidas efectivas. En casos más severos o recurrentes, los especialistas pueden considerar tratamientos preventivos como antiinflamatorios o bloqueos del ganglio esfenopalatino.

En conclusión, el «brain freeze» es un fenómeno que, aunque breve, es una manifestación del complejo funcionamiento del sistema nervioso. Un gesto cotidiano como beber algo frío puede desencadenar reacciones biológicas que protegen al cerebro. La próxima vez que experimentes este dolor, recuerda que es un recordatorio del delicado equilibrio que regula nuestras funciones vitales.

Redacción

Equipo editorial especializado en actualidad ibérica, economía y política. Información rigurosa y análisis profundo de España y Portugal las 24 horas del día.

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