El Dr. Fernando Cordido, reconocido endocrinólogo y experto en el tratamiento de la obesidad, ha destacado la importancia de un enfoque a largo plazo en la salud de los pacientes con sobrepeso, a pesar de la efectividad de los nuevos fármacos como la semaglutida y la tirzepatida. Durante una reciente entrevista, Cordido enfatizó que, aunque estos medicamentos representan un avance significativo, el estilo de vida sigue siendo la clave del éxito en el tratamiento de la obesidad.
Desde su inicio en la práctica médica, Cordido ha sido testigo de una evolución notable en la endocrinología, con descubrimientos que han modificado profundamente la comprensión del metabolismo humano. Según el especialista, el desarrollo de los agonistas del GLP-1 ha sido uno de los hitos más importantes en los últimos años, permitiendo un control más efectivo de la diabetes y la obesidad. Sin embargo, subraya que estos tratamientos deben complementarse con cambios en la dieta y el ejercicio.
La revolución de los fármacos
Los fármacos como la semaglutida y la tirzepatida han pasado de ser tratamientos para la diabetes a convertirse en la primera línea de defensa contra la obesidad. Cordido resalta que, a pesar de su eficacia, no se debe olvidar que la modificación del estilo de vida sigue siendo primordial. «La primera línea debe ser el estilo de vida; el tratamiento farmacológico debe reforzarlo», afirma.
El Dr. Cordido también advierte sobre los riesgos asociados con la rápida pérdida de peso. «Perder peso puede tener inconvenientes, como la pérdida de masa muscular, lo que es especialmente preocupante en pacientes mayores», explica. A pesar de la eficacia de estos medicamentos, la tendencia a recuperar peso tras la interrupción del tratamiento es un tema que requiere atención.
Un cambio de mentalidad necesaria
Además, Cordido señala que la percepción de la salud y el peso está influenciada por la imagen corporal, especialmente en la era de las redes sociales. «Los pacientes con sobrepeso piensan a corto plazo, pero en salud hay que pensar a largo plazo», advierte, sugiriendo que es crucial que los pacientes comprendan los efectos futuros de sus decisiones actuales.
El especialista también ha notado un aumento en la demanda de estos tratamientos, con pacientes que buscan recetas incluso sin cumplir con los criterios de obesidad. «Muchos pacientes llegan informados, gracias al papel de los medios de comunicación, pero a menudo desconocen también los aspectos negativos de estos medicamentos», indica.
Durante la conversación, Cordido destacó la importancia de comparar la obesidad en España con países desarrollados que tienen tasas mucho más bajas, como Japón. «Es fundamental defender nuestra dieta mediterránea y los hábitos saludables que nos caracterizan», concluyó.
En un contexto donde la obesidad sigue siendo una epidemia creciente, el Dr. Cordido aboga por un enfoque equilibrado y consciente para abordar esta crisis de salud, recordando que la sostenibilidad es clave para el bienestar a largo plazo.
