La Fundación Española de Cefaleas (FECEF) ha publicado un documento informativo que detalla las diez cosas que se deben conocer sobre la migraña, una enfermedad neurológica grave que afecta al 12% de la población española. Este material tiene como objetivo aclarar conceptos y responder a preguntas frecuentes tanto de pacientes como de sus familiares.
La migraña es una de las cefaleas más comunes, siendo de tres a cuatro veces más frecuente en mujeres. Su impacto en la vida diaria de quienes la padecen es considerable. El doctor Julio Pascual, presidente del Comité Científico y de Publicaciones de la FECEF y miembro del Grupo de Estudio de Cefaleas de la Sociedad Española de Neurología (SEN), aclara que “aunque muchas personas confunden migraña con cefalea, no son lo mismo.” La migraña pertenece al grupo de las cefaleas primarias, que no presentan una causa estructural identificable.
Características de la migraña
Más del 90% de las personas que consultan por dolor de cabeza sufren cefaleas primarias, siendo la migraña el tipo más frecuente en las consultas. El síntoma esencial es un dolor de cabeza intenso que aparece en episodios que pueden durar entre cuatro horas y tres días. Este dolor suele ser unilateral, pulsátil y se agrava con estímulos externos como la luz, el ruido o el movimiento, pudiendo ir acompañado de náuseas y vómitos.
El 70-80% de los casos son considerados migrañas sin aura, mientras que un 20-30% presenta síntomas de aura antes del episodio, que incluyen alteraciones visuales y adormecimiento. Aunque la migraña puede aparecer en la niñez o pubertad, es poco común que inicie después de los 30 años.
En algunos casos, la frecuencia de las crisis puede aumentar entre los 30 y 50 años, lo que puede llevar a la migraña crónica, definida como más de 15 días de dolor de cabeza al mes. El diagnóstico se realiza a partir de la sintomatología y una exploración neurológica normal, sin necesidad de estudios radiológicos en la mayoría de los casos.
Factores genéticos y tratamiento
Según el documento de la FECEF, la migraña tiene una base genética, ya que los pacientes frecuentemente tienen familiares afectados. Los genes involucrados predisponen a la activación excesiva del circuito del nervio trigémino, lo que provoca inflamación y dolor. Factores no genéticos, como cambios hormonales, estrés y alteraciones del sueño, también pueden influir en la frecuencia de las crisis.
Aunque actualmente no existe una cura, el doctor Pascual sugiere mantener una buena higiene del sueño, realizar ejercicio regular y llevar una alimentación equilibrada como medidas para mejorar la calidad de vida. En cuanto al tratamiento de las crisis, se recomienda la administración temprana de fármacos específicos, ya que analgésicos comunes como el paracetamol suelen ser insuficientes. Para crisis moderadas, se pueden utilizar antiinflamatorios, pero en casos más graves los triptanes son la opción preferida.
El tratamiento preventivo se considera cuando las crisis son frecuentes o no responden al tratamiento habitual. Este tipo de tratamiento puede incluir betabloqueantes o topiramato, y debe mantenerse durante al menos seis meses. Nuevas opciones como infiltraciones de toxina botulínica y tratamientos específicos frente al CGRP han demostrado eficacia en pacientes que no responden a los fármacos tradicionales.
Con el compromiso de mejorar la calidad de vida de quienes sufren migrañas, la FECEF continúa su labor educativa y de concienciación sobre esta compleja condición.
