El pasado 15 de febrero de 2023, Montse López se sometió a un trasplante de corazón en el Hospital Clínic de Barcelona, una operación que le otorgó una nueva oportunidad de vida tras sufrir una cardiopatía dilatada. Esta intervención, que fue grabada por el equipo de EL PERIÓDICO DE CATALUNYA, ha dado lugar al documental titulado ‘Un corazón contra reloj’, que relata su experiencia antes, durante y después del trasplante.
Ocho meses después de la operación, Montse regresó al hospital, esta vez sin muletas y rodeada de aplausos, para presentar el documental que narra su historia. «No es fácil, y cuando estás en mi situación es un poco complicado. Como en todos los trasplantados hay secuelas, pero estoy viva, tengo una vida extra, vale la pena», declaró ante un centenar de asistentes emocionados. Su historia es un testimonio del valor de la donación de órganos y del trabajo del sistema de salud pública.
Un camino hacia el trasplante
Montse, que descubrió a los 35 años que padecía una cardiopatía dilatada de origen genético, veía cómo su estado de salud se deterioraba progresivamente. En diciembre de 2022, fue incluida en la lista de espera para un trasplante. Su experiencia con los periodistas Beatriz Pérez, Manu Mitru y Patricio Ortiz, quienes la entrevistaron justo un día antes de la operación, subraya la importancia de compartir historias de vida en situaciones críticas. «Las cifras en bruto no llegan lo suficiente. No se cuenta tanto cómo se vive la incertidumbre de estar esperando porque, si no, te mueres», comentó Pérez.
La operación comenzó a medianoche y terminó sobre las cinco de la madrugada, un proceso que sorprendió a los involucrados por la cantidad de profesionales de la salud que forman parte de la sanidad pública. “Hemos flipado con la cantidad de gente involucrada en la sanidad pública, es impresionante. Y es sorprendente que funcione fuera de la lógica de mercado”, enfatizó Ortiz.
Impacto y concienciación sobre la donación
El documental no solo narra el día del trasplante, sino que también sigue la recuperación de Montse durante los cuatro meses posteriores. En este tiempo, se observa cómo vuelve a retomar actividades cotidianas que antes le eran imposibles, incluyendo momentos especiales como asistir a un concierto de Estopa. Esta historia ha inspirado a muchos, como una mujer del público que compartió su propio testimonio: «La felicidad es despertar viva cada día y agradecer a los doctores y al donante que seguimos vivos, que somos muy privilegiados».
La importancia de la donación de órganos fue un tema recurrente en la presentación. Varias personas del público expresaron su deseo de donar tras escuchar las historias de vida. Una mujer comentó: «He hecho mis últimas voluntades, quiero evitar que mis hijas deban tomar esa decisión». El doctor Ángel Ruiz, coordinador de trasplantes del Clínic, aclaró que no hay edad límite para donar órganos, reiterando que «los enfermos trasplantados también pueden ser donantes».
La proyección del documental y el posterior debate generaron preguntas sobre el futuro de la medicina y la donación. Estudiantes de Biomedicina se interesaron por la posibilidad de los organoides, a lo que el doctor Castellà, jefe de servicio de Cirugía Cardiovascular, respondió que aunque parecen ser el futuro, nunca son el presente.
El evento concluyó con un llamado a la acción: “Vean el documental”, sugirieron los sanitarios, destacando su papel en la concienciación sobre la donación de órganos y la importancia de contar historias como la de Montse.
