Barcelona y Madrid se han consolidado como las ciudades de la Unión Europea donde el alquiler consume un porcentaje más elevado del salario de los trabajadores, alcanzando un alarmante 74% en ambos casos. Este dato se extrae de un informe sobre vivienda publicado recientemente por el Consejo Europeo, que revela la creciente dificultad que enfrentan los inquilinos en estas ciudades para hacer frente a los costes de la vivienda. Este informe llega en un momento clave, justo antes del primer debate sobre vivienda a nivel de líderes que se celebrará en Bruselas.
El documento destaca que únicamente Lisboa supera a Barcelona y Madrid en este aspecto, con un asombroso 116% de los ingresos destinados al alquiler. Este fenómeno plantea serias preocupaciones sobre la sostenibilidad del mercado de la vivienda en estas ciudades, donde muchos inquilinos afirman que ni siquiera con dos trabajos pueden cubrir los gastos de su vivienda. El informe indica que, aunque las acciones europeas podrían complementar los esfuerzos nacionales, la diversidad entre los Estados miembros dificulta la creación de políticas efectivas y uniformes.
Aumento del precio del alquiler en España
El informe también resalta que el precio del alquiler en España ha aumentado un 72% en la última década, superando la media de la Unión Europea, que se sitúa en 58,33%. Sin embargo, este incremento es considerablemente menor que el de otros países como Hungría, donde los precios han subido un 237,54%, o Lituania, con un 147,69%. Por el contrario, Finlandia es el único país europeo que ha experimentado una disminución de precios, con un descenso del 0,4%.
Entre 2013 y 2018, las capitales europeas vieron aumentos de los precios de los alquileres que superaron varias veces el crecimiento a nivel nacional, siendo Lisboa, Dubái, Madrid, Estocolmo y Luxemburgo algunos de los casos más evidentes. Ante esta situación, varios gobiernos han considerado la posibilidad de regular los alquileres o crear programas de subvenciones para aliviar la presión sobre los inquilinos.
La realidad de los jóvenes en el mercado de la vivienda
El informe también destaca que España ocupa el quinto lugar en la Unión Europea en cuanto a la edad de emancipación de los jóvenes, quienes se independizan a una media de 30 años. Este dato es superado solo por Croacia, Eslovaquia, Grecia e Italia. Esta tendencia sugiere que los altos precios del alquiler están dificultando el acceso a la vivienda para las nuevas generaciones, lo que podría tener implicaciones a largo plazo en la estructura social y económica del país.
A pesar de las adversidades, la investigación señala que varios países del sur de Europa mantienen una perspectiva positiva sobre la construcción de viviendas. Se espera que España tenga un crecimiento del 3,2% en este sector para 2025, impulsado por fondos de recuperación y proyectos de modernización de infraestructuras. En este contexto, Portugal y Grecia también prevén incrementos significativos en la construcción, con expectativas de 4% y 10%, respectivamente, lo cual podría mejorar la situación del mercado de la vivienda en estos países.