La situación sanitaria en Gran Canaria se ha visto alterada por un brote de salmonella que ha afectado a un total de 17 personas en el Hospital Insular y su anexo, el Hospital Juan Carlos I. Según la Dirección General de Salud Pública del Servicio Canario de la Salud, estas personas han presentado síntomas gastrointestinales a raíz de la intoxicación alimentaria.
De los afectados, tres pacientes ya han recibido el alta hospitalaria y otros siete han sido dados de alta epidemiológica tras superar los síntomas de la toxiinfección, aunque permanecerán ingresados por otras patologías subyacentes. De los 17 casos, nueve son pacientes del Hospital Universitario Insular y ocho pertenecen al hospital polivalente adyacente.
Activación de protocolos de seguridad
Desde la detección de los primeros síntomas, la dirección del complejo hospitalario ha activado los protocolos establecidos para estos casos. Se han analizado muestras de alimentos y de los pacientes afectados, y se está a la espera de los resultados de las analíticas correspondientes. Además, se mantiene actualizado el informe epidemiológico sobre la situación.
El servicio de cocina del complejo hospitalario, que también abastece al Hospital Juan Carlos I, ha inmovilizado los alimentos sospechosos para evitar futuras infecciones. Esta medida es parte de un esfuerzo más amplio por parte de la Unidad de Vigilancia Epidemiológica de la dirección general, que ha comenzado el estudio epidemiológico pertinente y continúa supervisando la situación por si se presentan más casos.
Las autoridades sanitarias han reiterado la importancia de seguir los protocolos establecidos y de estar atentos a cualquier síntoma que pueda surgir en la población afectada. La situación se mantiene bajo vigilancia para garantizar la salud pública en la región.
