El Ayuntamiento de Alía ha iniciado una intensa campaña de movilización tras recibir la notificación del cierre del Puesto de la Guardia Civil. La alcaldesa, Cristina Ramírez, lidera esta acción que busca evitar la clausura de un servicio esencial para la seguridad del municipio y de las localidades cercanas, como el Poblado del Cíjara, Puerto Rey y Calera.
En apenas unos días, la comunidad ha respaldado la causa con más de 1.500 firmas, un número que supera la población total de las áreas afectadas, que apenas suma 1 000 habitantes. La alcaldesa Ramírez ha expresado su preocupación, indicando que «no nos han dado ningún motivo oficial todavía» para justificar este cierre.
Respuestas de la Delegación del Gobierno
Ante las inquietudes expresadas por los residentes, la Delegación del Gobierno ha confirmado que este cierre forma parte de una estrategia para «reestructurar el modelo de funcionamiento» de la Guardia Civil. Aunque aseguran que no se perderán las labores de vigilancia, ya que algunos días por semana los agentes se desplazarán a Alía para realizar trámites administrativos, la alcaldesa teme que esto no sea suficiente para mantener la seguridad en la localidad.
Ramírez ha afirmado: «Ahora mismo somos un pueblo seguro y tranquilo, pero gracias a que tenemos aquí el puesto de la Guardia Civil. Nos negamos rotundamente a la idea que proponen. No hay ningún tipo de inseguridad, es cierto, pero cuando los agentes se vayan, esto se va a convertir en un hervidero de delincuentes».
Impacto de la distancia y recogida de firmas
La distancia entre Alía y el Poblado de Cíjara o Puerto Rey supera los 50 kilómetros, lo que podría dificultar la respuesta de la Guardia Civil en caso de emergencia. Actualmente, los agentes visitan estos municipios semanalmente, lo que garantiza un nivel de seguridad que los residentes consideran vital.
La recogida de firmas ha contado con el apoyo de pescadores del pantano cercano, quienes también han expresado su temor a perder la seguridad en la zona. «No sabemos lo que pasará cuando se cierre, pero parece que quedarán desamparados», ha comentado Ramírez, quien destaca la importancia de mantener el puesto operativo.
La entrega oficial de las firmas a la Delegación del Gobierno se realizará «muy pronto», según ha indicado la alcaldesa. Una vez en manos del representante gubernativo, la delegación ha afirmado que «tendremos la oportunidad de responder».
A pesar del anuncio del desmantelamiento del recinto, el Ayuntamiento continúa realizando obras de mejora en el interior del puesto, acondicionando espacios como el garaje, el patio y las oficinas, lo que resalta la contradicción entre el cierre programado y el esfuerzo local por mantener y mejorar la seguridad en Alía.