El delegado del Gobierno en Galicia, Pedro Blanco, ha manifestado su firme postura en favor de la quita de la deuda pública de las comunidades autónomas, propuesta por el Ejecutivo central. Durante su intervención en A Coruña, Blanco ha subrayado que rechazar una condonación de 4 010 millones de euros, que equivalen al 33% de la deuda gallega, «no tiene justificación».
Blanco ha afirmado que Galicia «debe luchar por tener más recursos, más servicios y cubrir necesidades que son muchas y, en muchos casos, muy urgentes». En un contexto de creciente presión social y económica, el delegado ha hecho un llamado a la Xunta de Galicia, liderada por Alfonso Rueda, para que asuma «de una vez las responsabilidades» en la apertura de nuevas rutas en los aeropuertos gallegos, especialmente tras la reciente salida de Ryanair de la comunidad.
La urgencia de nuevas rutas aéreas
En sus declaraciones a la agencia Efe, Blanco ha enfatizado que es «absolutamente inaceptable» la decisión de Ryanair de abandonar Galicia. Ha instado al gobierno autonómico a liderar la reorganización del mapa aéreo, afirmando que «lo que hace falta es que la Xunta se ponga al frente, como están exigiendo varios ayuntamientos, para establecer y abrir nuevas posibilidades».
La salida de la compañía irlandesa ha llevado a una situación de monopolio en las rutas hacia Madrid y Barcelona, lo que pone en riesgo la conectividad de la comunidad. Blanco ha calificado la decisión de Ryanair como «absolutamente injustificable», recordando que la compañía exige una rebaja de las tasas aeroportuarias a pesar de que el Gobierno está invirtiendo en infraestructuras con 150 millones de euros destinados recientemente a los aeropuertos, además de importantes bonificaciones para Galicia y los pequeños aeropuertos.
Responsabilidad y colaboración
El delegado ha insistido en que no se debe ceder ante las presiones de Ryanair, afirmando que «no hay que ponerse del lado de la compañía, como hace algún conselleiro», sino que es necesario «trabajar junto a los ayuntamientos afectados para abrir nuevas rutas turísticas».
«Lo que toca es dar la cara y trabajar, no estar ausentes ni enfrentarnos al Gobierno», concluyó Blanco, enfatizando la necesidad de colaboración entre las distintas administraciones para garantizar un futuro más prometedor para la aviación en Galicia.