La Secretaría de Medio Ambiente y Bienestar Animal de Juventudes Socialistas de Melilla (JSME), liderada por Lucía Rubio, ha denunciado el alarmante estado de abandono de la Granja Escuela Gloria Fuertes, exigiendo una intervención inmediata por parte del Gobierno local. Durante una reciente visita, miembros de la organización constataron condiciones deplorables, como la presencia de un cabrito recién nacido sin sombra ni refugio, y más de 50 palomas hacinadas en un pequeño palomar, a pesar de contar con jaulas vacías disponibles.
“La Granja Escuela no puede seguir siendo el reflejo de la desidia institucional”, afirmó Rubio, quien insistió en que el espacio necesita un “proyecto serio centrado en el bienestar animal y la educación ambiental”. La situación del estanque de los patos también fue motivo de preocupación, ya que presenta agua turbia, algas y zonas estancadas, lo que podría suponer un riesgo para la salud pública al favorecer la proliferación de mosquitos. Rubio destacó que este aspecto descuidado refuerza la sensación de abandono que se percibe en el recinto.
JSME también criticó el deterioro visible de otras instalaciones, como jaulas vacías, basura acumulada, cartelería dañada y zonas educativas en desuso, incluyendo el jardín de reflexoterapia. Además, lamentan la escasa promoción de actividades educativas y ambientales que sí se llevan a cabo, como los huertos urbanos o el nacimiento de animales. “Todo apunta a una gestión sin visión de futuro, sin cuidado y sin sensibilidad”, subrayaron desde JSME.
Demandas y responsabilidad institucional
Rubio también hizo hincapié en el esfuerzo del personal de la Granja Escuela y de los ciudadanos involucrados en los huertos sociales, eximiéndolos de responsabilidad directa en esta situación. “El problema está arriba. La respuesta institucional no puede ser negar la realidad. Tiene que ser asumir responsabilidades, escuchar a la ciudadanía y actuar”, enfatizó.
La organización juvenil considera especialmente grave que se destinen fondos a proyectos que destruyen zonas verdes, como en el Parque Periurbano de Cabrerizas, mientras un espacio “de incalculable valor educativo y ambiental como la Granja Escuela se deteriora ante nuestros ojos”. Desde JSME instan al Gobierno local a actuar de inmediato, dotando a la Granja Escuela de un plan de mejora estructurado, un presupuesto real, recursos materiales y humanos y una apuesta firme por la educación ambiental y el bienestar animal.