El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijoó, ha tomado la decisión de mantener a Alberto Nadal en el Comité Ejecutivo del partido, según el organigrama difundido el pasado lunes. Esta elección se produce en un contexto de creciente oposición interna que ha solicitado la destitución de Nadal, debido a su vinculación como uno de los hombres fuertes de Cristóbal Montoro durante su mandato como ministro de Hacienda.
La controversia en torno a Nadal ha cobrado relevancia en las últimas semanas, especialmente tras la imputación de Montoro y la dimisión de la diputada Noelia Núñez por falsear su currículum. Aunque Nadal no está imputado en el caso Montoro, su nombre figura en el sumario, lo que ha generado un clima de desconfianza. Además, en el nuevo organigrama del PP, Nadal se presenta como el único miembro sin un área asignada, lo que ha suscitado especulaciones sobre su futuro dentro del partido.
La situación actual de Nadal en el PP
Según las fuentes consultadas, los nombramientos definitivos se llevarán a cabo en septiembre, momento en el que se espera que Nadal se integre a la vicesecretaría del partido. La presión interna ha llevado a algunos sectores a considerar necesaria su dimisión para evitar daños mayores a la imagen del PP, aunque inicialmente no estuvo involucrado en los casos de posible tráfico de influencias ligados al despacho profesional de Montoro.
Nadal, quien fue secretario de Estado de Energía y también de Presupuestos durante el Gobierno de Mariano Rajoy, aún no ha asumido su nuevo cargo en el PP, dado que actualmente ocupa el puesto de director ejecutivo del Banco Interamericano de Desarrollo en Washington. Se espera que, a la finalización de su compromiso en la institución, se una al equipo de Feijoó, quien confía en su experiencia para afrontar los retos que se avecinan.
La situación actual de Nadal pone de manifiesto las tensiones que persisten dentro del Partido Popular, donde todas las miradas están puestas en los llamados ‘hermanos nadales’, en referencia a Alberto y a su hermano Álvaro Nadal. La estrategia de Feijoó al mantener a Nadal en la Ejecutiva se interpretará como un intento de consolidar su liderazgo frente a las diversas corrientes internas que buscan redefinir el rumbo del partido en un contexto político cada vez más complejo.