El Gobierno de la Ciudad Autónoma de Melilla ha salido en defensa de los aficionados a la tauromaquia, tras la propuesta de la Fundación Franz Weber para convocar una consulta popular sobre el uso de dinero público destinado a financiar la corrida de toros programada para el 3 de septiembre, coincidiendo con la Feria de la ciudad. El vicepresidente primero del Gobierno, Miguel Marín, ha instado al respeto hacia aquellos que disfrutan de esta tradición cultural, enfatizando la importancia de reconocer las diferentes sensibilidades de la población melillense.
Marín subrayó que el Ejecutivo siempre ha mostrado respeto por las diversas opiniones existentes en la sociedad, pero también defendió su derecho a organizar la corrida de toros. «Es una fiesta arraigada en España y que forma parte de la cultura. Por tanto, los amantes del mundo del toreo tienen derecho a disfrutar, aunque sea una vez al año, de la fiesta nacional», afirmó el vicepresidente.
Controversia sobre el uso de recursos públicos
La solicitud de la Fundación Franz Weber se enmarca en el artículo 22 de la Carta de Derechos del Ciudadano, que garantiza el derecho a recibir respuesta a las peticiones formuladas ante la Administración. La organización justifica esta propuesta como un mecanismo democrático que permite a la ciudadanía decidir cómo deben invertirse los recursos públicos. Según la Fundación, este tipo de referéndum es común en otros países europeos y permite a los ciudadanos influir directamente en las políticas de sus administraciones.
Desde la Fundación critican que, desde el regreso del Partido Popular al Gobierno local, se hayan utilizado diversas fórmulas jurídicas para garantizar la celebración de corridas de toros, incluyendo licitaciones urgentes y contratos negociados sin publicidad. Denuncian que el gasto público en estos espectáculos alcanza cientos de miles de euros, mientras persisten problemas estructurales y necesidades sociales no resueltas en la ciudad.
Convocatoria de manifestación antitaurina
En respuesta a esta situación, la Plataforma Melilla Antitaurina ha convocado una manifestación que se llevará a cabo el mismo 3 de septiembre, a las 17:30 horas, en el paseo central de la avenida General Aizpuru. Esta concentración se realiza cada año durante la corrida de toros de Feria, con el objetivo de mostrar el rechazo a la tauromaquia, la cual consideran un «acto de barbarie». La plataforma anima a todos los melillenses contrarios a esta práctica a participar de manera pacífica.
Si se acepta la propuesta de consulta, correspondería al presidente de Melilla solicitar al Gobierno central la autorización para llevarla a cabo, un trámite que requeriría la aprobación en el Consejo de Ministros, conforme a lo establecido en la Constitución de 1978.
La discusión sobre la tauromaquia en Melilla refleja un profundo debate cultural y social que atraviesa la ciudad, donde la tradición y las sensibilidades contemporáneas chocan en torno al uso de recursos públicos y el respeto a las diversas opiniones de sus habitantes.