El Cabildo de Gran Canaria ha aprobado la implementación de un nuevo impuesto que consiste en cobrar un céntimo por cada litro de gasolina que se expenda en las gasolineras de la isla. Esta medida, que entrará en vigor en enero de 2026, tiene como objetivo financiar políticas de prevención de incendios forestales, según ha informado el presidente del Cabildo, Antonio Morales.
Se estima que el denominado ‘céntimo verde’ generará ingresos cercanos a cinco millones de euros anuales para las arcas del Cabildo. Llenar el depósito de un vehículo con capacidad para 60 litros implicará un coste adicional de 60 céntimos en cada recarga. Esta decisión fue adoptada en un pleno ordinario donde se evidenció la tensión existente entre los miembros del grupo Nueva Canarias-Bloque Canarista tras la reciente destitución de su portavoz, Teodoro Sosa.
Destinos de la recaudación y críticas políticas
El dinero recaudado se destinará a labores de prevención y gestión forestal durante un periodo de 12 meses, con un coste estimado en 2,5 millones de euros. Entre las acciones previstas se encuentran la realización de un contrato de servicio para cuidados culturales en repoblaciones forestales, la extracción de troncos en la Cumbre, y la gestión de corredores ecológicos en barrancos. También se trabajará en la conservación de palmerales y el mantenimiento de los Parques Rurales de Gran Canaria.
Durante el debate, el portavoz del Partido Popular (PP), Miguel Jorge Blanco, criticó la medida al argumentar que el ‘céntimo verde’ no se está implementando realmente por motivos ambientales, sino como una solución a la mala gestión económica del Cabildo. Por su parte, la portavoz de Coalición Canaria, Vidina Cabrera, apoyó la medida, aunque subrayó la necesidad de asegurar que los fondos sean utilizados de manera correcta.
Reacciones y el futuro político de Sosa
El portavoz de Vox, Yeray Suárez, también se mostró en contra del nuevo impuesto, argumentando que representa una carga adicional para las familias que ya enfrentan dificultades económicas. A medida que avanzaba la sesión, Sosa, quien se encuentra en su último pleno como portavoz, fue ignorado en varias ocasiones, lo que refleja el creciente malestar dentro de su grupo.
Por otro lado, el consejero de Hacienda, Pedro Justo, defendió la decisión de recortar partidas destinadas a otros eventos para financiar el mantenimiento de carreteras, asegurando que existen suficientes fondos para ambos propósitos. La tensión entre los consejeros de Nueva Canarias-Bloque Canarista y la oposición se hizo palpable durante el pleno, que también aprobó un plan de obras para el próximo año con una asignación de 18,4 millones de euros para los municipios y mancomunidades.
En resumen, la implementación del ‘céntimo verde’ en Gran Canaria ha generado un amplio debate político y social sobre la gestión de recursos y la prevención de incendios, en un contexto de creciente tensión entre los diferentes grupos políticos de la isla.
