La formación política Somos Melilla ha presentado una denuncia por la difusión masiva de un vídeo de contenido sexual elaborado mediante inteligencia artificial, conocido como deepfake. Este montaje manipula las imágenes de su presidente, Amín Azmani, la secretaria de Economía, Jadu Driss, y el comunicador Kiko Hernández, con el objetivo, según el partido, de engañar a la ciudadanía.
El vídeo, que ha circulado a través de grupos de WhatsApp vinculados a activistas cercanos al Partido Popular, recrea de forma falsa una escena que incluye desnudez y un beso entre hombres. Somos Melilla considera que este contenido es «profundamente ofensivo» y busca «denigrar y dañar la reputación» de sus miembros, subrayando que no se trata de una mera parodia política, sino de un ataque digital con intenciones difamatorias.
Acciones legales y contexto político
El partido vincula la difusión del vídeo con un intento de desacreditar su imagen en un momento de mayor escrutinio sobre la acción del Gobierno local. En este sentido, Somos Melilla ha anunciado que tomará acciones legales, tanto penales como civiles, contra los responsables de esta manipulación.
La formación política destaca que el uso de imágenes del colectivo LGTBIQ+ para desacreditar a representantes públicos es inaceptable y condena cualquier forma de ataque que utilice la tecnología de esta manera. La denuncia pone de manifiesto la creciente preocupación por el uso de técnicas de manipulación digital en el ámbito político, donde la desinformación puede tener consecuencias graves.
Reacciones en la comunidad
La difusión de este tipo de contenido ha generado un amplio rechazo en la comunidad, tanto por su naturaleza ofensiva como por las implicaciones que conlleva. La comunidad LGTBIQ+ ha expresado su firme apoyo a Somos Melilla, resaltando la necesidad de proteger la integridad de todos los individuos frente a ataques basados en la manipulación digital.
Este incidente refleja un clima de tensión en la política local, donde las estrategias para desacreditar a los oponentes se están volviendo cada vez más sofisticadas y dañinas. La formación espera que su denuncia sirva como un precedente y un aviso a aquellos que recurren a tácticas engañosas para dañar la imagen de otros.
