Aldi ha anunciado que durante este otoño adquirirá más de 8 489 toneladas de productos frescos de proximidad, lo que representa un aumento del 30% en comparación con el mismo periodo del año anterior. Esta decisión refleja el compromiso de la cadena con el apoyo a la producción nacional y la preferencia de los consumidores por alimentos de origen local.
Entre los productos que se destacan en esta compra se encuentran granadas, higos, manzanas, caquis, castañas y uvas, así como también berenjenas, calabazas, lechugas, pepinos, pimientos, puerros y zanahorias. Las frutas provendrán de regiones como Aragón, Extremadura, Cataluña y la Comunidad Valenciana, mientras que las verduras serán cultivadas en Andalucía, C Castilla y León, Murcia y Navarra.
Compromiso con el producto nacional
Aldi ha subrayado que esta iniciativa responde a los resultados de su Observatorio de Productos Frescos, donde se revela que el 85% de los españoles prefiere alimentos de origen nacional. Además, se destaca que cuatro de cada diez consumidores buscan productos de su propia región. La cadena trabaja estrechamente con proveedores locales y mantiene acuerdos estables, lo que permite que casi nueve de cada diez verduras y siete de cada diez frutas en sus tiendas sean españolas.
La noticia ha sido bien recibida en las redes sociales, donde muchos usuarios han expresado su apoyo a esta iniciativa. Comentarios como «Ya me gustaba esa superficie, ahora más, un pelín más cara en cosas pero con mejor calidad que muchas otras» reflejan el aprecio por la calidad de los productos nacionales. Asimismo, otros consumidores han manifestado la importancia de que estos compromisos se hagan realidad: «No es solo decir que lo va a hacer, es hacerlo después y no encontrarte sorpresas».
La situación del campo español
A pesar del apoyo de Aldi a los productores locales, la situación del campo español se complica por la competencia desleal que enfrentan los agricultores. La importación masiva de frutas y hortalizas desde países como Marruecos ha aumentado significativamente, con datos que indican que en el primer trimestre de 2025 España compró 191 906 toneladas de productos hortofrutícolas procedentes de este país, lo que supone un incremento del 22% respecto al mismo periodo del año anterior.
Este auge en las importaciones ha generado preocupación en el sector agrario español, que denuncia que los productos marroquíes no cumplen con los mismos requisitos fitosanitarios, laborales y medioambientales que los exigidos a los productos europeos. «Es imposible competir así», afirman desde cooperativas y asociaciones agrarias.
Según datos de DataComex y del Ministerio de Economía, los productos más importados desde Marruecos incluyen el tomate, el pimiento, la judía verde, el aguacate y el arándano, todos ellos cultivos clave del sureste español, particularmente en provincias como Almería, Murcia o Valencia. El tomate, en particular, ha visto un aumento en las importaciones, con 32 313 toneladas compradas entre enero y marzo, lo que representa un 34% más que en el primer trimestre de 2024.
La Federación Española de Productores Exportadores de Frutas y Hortalizas (FEPEX) ha lanzado un aviso claro sobre la situación, advirtiendo que el crecimiento de las compras de frutas y hortalizas a Marruecos es un fenómeno continuo. Según ellos, el actual Acuerdo de Asociación de la Unión Europea con Marruecos ha quedado «obsoleto», lo que ha llevado a un desplazamiento del tomate español del mercado.
En resumen, la decisión de Aldi de aumentar la compra de productos españoles es un paso positivo para el sector agrario, pero no puede ocultar los desafíos que enfrenta el campo español ante la creciente competencia internacional.