Un trágico suceso ha tenido lugar en Middleburg, al norte de Florida, donde un adolescente de 14 años, identificado como Trevor Lee, ha asesinado a sus padres, David Lee (44 años) y Brandi Smith (45 años), utilizando un arma de fuego en su domicilio. Tras cometer el crimen, el joven se comunicó con el número de emergencias para confesar su acción y entregarse a las autoridades.
La Oficina del Alguacil del Condado de Clay ha confirmado que Trevor disparó a sus padres y, en la llamada al 911, afirmó que había «matado a sus padres dentro de su casa en la calle Silver Point». Además, indicó que se encontraba «esperando en el estacionamiento de una iglesia cercana para que se lo llevaran bajo custodia».
Los agentes que acudieron al lugar encontraron los cuerpos de las víctimas con heridas de bala. Aunque la investigación sigue en curso, las autoridades han señalado que se trata de un «incidente aislado y doméstico», lo que no representa «una amenaza para la comunidad».
Aumento de la violencia armada juvenil en EE. UU.
Este trágico hecho se produce en un momento de creciente preocupación por la violencia armada entre los jóvenes en Estados Unidos. Según un informe del Council on Criminal Justice, los homicidios cometidos por menores de edad han aumentado un 65% entre 2016 y 2022, alcanzando la cifra de 521 en el último año. Esta alarmante tendencia ha llevado a organizaciones como The Sentencing Project a advertir que más de un millón de niños y adolescentes de entre 12 y 17 años, aproximadamente el 5% del total de esa franja de edad, poseen un arma de fuego.
La comunidad de Middleburg se enfrenta a un profundo dolor tras este incidente, que pone de relieve la complejidad de la violencia familiar y el uso de armas en la sociedad estadounidense. Las autoridades locales han instado a la población a mantenerse informada y a buscar ayuda en situaciones de riesgo, mientras continúan investigando las circunstancias que llevaron a este devastador acto.
