Al menos tres personas han muerto y once han resultado heridas en el accidente de un avión de carga de la empresa UPS en el aeropuerto internacional Muhammad Ali de Louisville, Kentucky, ocurrido este martes. Según la información proporcionada por las autoridades, el gobernador del estado, Andy Beshear, confirmó en una rueda de prensa que estas cifras son provisionales y lamentó que «el número va a crecer» en las próximas horas.
Beshear también indicó que algunos de los heridos se encuentran en estado grave y que los cuerpos de rescate y emergencias están trabajando en la zona. «Estamos reuniendo información lo más rápido que podemos», advirtió el gobernador. El vuelo 2976 de UPS se estrelló apenas a 55 metros de altura, cuando intentaba despegar con destino a Honolulu, según el informe de la Administración Federal de Aviación (FAA).
El accidente provocó un incendio de grandes dimensiones en las inmediaciones del aeropuerto, lo que ha llevado a las autoridades locales a emitir una alerta que restringe el tránsito en un radio de cinco millas (8 kilómetros) alrededor del área siniestrada. Esta situación ha provocado además el retraso de decenas de vuelos hasta que se logre controlar la situación en la pista.
Las causas del desastre están siendo objeto de investigación por parte de las autoridades competentes. Cabe destacar que Louisville alberga el principal centro de operaciones aéreas de UPS, donde la compañía opera un total de 291 aeronaves, según un informe de la empresa. La magnitud de este trágico suceso ha conmocionado a la comunidad local y ha puesto de relieve la importancia de la seguridad aérea en las operaciones de carga.
Los esfuerzos de los servicios de emergencia continúan mientras se espera más información sobre las circunstancias que rodearon el accidente.
