Un grupo de aproximadamente mil artistas israelíes, entre los que se encuentran escritores, actores y profesionales de diversas disciplinas, ha hecho un llamado urgente a su gobierno para que detenga lo que han denominado «el horror en Gaza». Este pronunciamiento se realizó a través de una declaración titulada «Paren el horror en Gaza», que critica abiertamente las políticas del gobierno israelí hacia la población palestina.
En el documento, los firmantes acusan a las autoridades israelíes de «hambrear intencionalmente» a la población de Gaza y de perpetrar asesinatos de civiles, incluidos niños. «Contra nuestra voluntad y nuestros valores, nos encontramos siendo cómplices de las horríficas acciones cometidas por nuestro gobierno en Gaza: el asesinato de niños y civiles, las políticas de hambruna, desplazamientos forzados y la destrucción sin sentido de ciudades enteras», señala el texto.
Además, la declaración insta a los soldados del ejército israelí a desobedecer «órdenes ilegales» y a «no cometer crímenes de guerra», demandando el fin de las hostilidades y la liberación de todos los rehenes. Aunque el documento no califica la situación en Gaza como genocidio, sigue representando un quiebre significativo con la narrativa oficial del gobierno de Benjamin Netanyahu, que niega la existencia de hambruna y crímenes de guerra en la región.
Críticas y reacciones al pronunciamiento
La declaración de los artistas ha sido recibida con un fuerte rechazo por aquellos alineados con el establishment israelí. Uno de los críticos más destacados fue el cantante Idan Amedi, quien es también reservista de las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF). Amedi describió a los firmantes como «un grupito de privilegiados que continúan reproduciendo la idiotez, la ignorancia y las mentiras». En sus declaraciones, instó a quienes firman a «combatir por un día en Gaza y después firmar la declaración».
Sin embargo, el deber de ser testigos de la situación no depende de estar físicamente en Gaza, dado que abundan los testimonios, videos y fotografías que documentan las brutalidades cometidas por el ejército israelí. La comunidad internacional ha comenzado a ver con mayor claridad la realidad en Gaza, lo que ha llevado a un creciente repudio hacia las acciones israelíes.
Esta situación es un reflejo de un cambio en el discurso público en Israel, que antes era impensable en los primeros meses de la invasión a Gaza. A medida que las acciones de las fuerzas armadas se vuelven más violentas y los testimonios de la población palestina más visibles, las voces disidentes se hacen más fuertes, aunque también enfrentan un aislamiento creciente.
El contexto internacional y la solidaridad con Palestina
Las declaraciones de los artistas israelíes se suman a las peticiones de rectores de cinco universidades israelíes que también han instado a Netanyahu a frenar el hambre en Gaza, así como a organizaciones de derechos humanos que han calificado la situación en la Franja como genocidio. A pesar de la resistencia interna, el panorama internacional muestra un creciente apoyo a la causa palestina, donde cada vez más voces claman por el fin de la violencia y el reconocimiento de los derechos del pueblo palestino.
La manifestación de estas disidencias en Israel pone de manifiesto que el relato sionista se está volviendo más difícil de sostener para una parte de la población, que ya no puede ignorar la magnitud de la crisis humanitaria en Gaza. La esperanza es que estas expresiones de denuncia se multipliquen y que la solidaridad internacional con el pueblo palestino se intensifique, ya que la denuncia del genocidio en Gaza se vuelve crucial para poner fin a esta trágica situación.
