El caso Koldo ha desatado una nueva ola de tensión en el Congreso de los Diputados, donde el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, se enfrentarán en una sesión de control que promete ser candente. Esta jornada política se ve marcada no solo por la ruptura entre Junts y el PSOE, sino también por el aniversario de la DANA y el avance de la investigación judicial relacionada con este caso, que sigue salpicando al entorno socialista.
La atención se centrará en la comparecencia de Sánchez en el Senado, prevista para el jueves, donde deberá responder a las acusaciones sobre una presunta trama de corrupción vinculada a contratos de material sanitario. Feijóo ha anticipado que su intervención se centrará en la pregunta: “¿Va a decir la verdad en la comisión sobre la trama Koldo-Ábalos-Cerdán?” Con esta estrategia, busca poner al presidente contra las cuerdas.
La presión aumenta en el Gobierno
Durante el fin de semana, Feijóo dejó claro que “si Sánchez dice la verdad, irá a los juzgados; y si miente, también”, refiriéndose a la comparecencia parlamentaria impulsada por su grupo. Mientras tanto, el jefe del Ejecutivo ha insistido en desvincular al PSOE de cualquier financiación irregular, acusando al PP de tener “una sede de corrupción en la calle Génova”.
Además de las cuestiones sobre el caso Koldo, Sánchez enfrentará en el Pleno otras dos preguntas relevantes: una de la portavoz del PNV, Maribel Vaquero, sobre medidas contra la multirreincidencia delictiva, y otra de la secretaria general de Podemos, Ione Belarra, centrada en la agenda política y social del Gobierno.
La vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, también será protagonista, respondiendo a tres preguntas del PP y una de Vox. Ester Muñoz, portavoz popular, cuestionará “qué España van a dejar cuando el Gobierno caiga”, mientras que el secretario general del partido, Miguel Tellado, preguntará “cuánto tiempo van a seguir ocultando la verdad a los españoles”.
Reacciones desde la oposición y la presión judicial
Desde Andalucía, Elias Bendodo enfatizará en la ética del Ejecutivo al interrogar si Montero “se siente cómoda en el Gobierno de la corrupción”. Desde Vox, Pepa Millán cuestionará si el Gobierno cree que los españoles “viven hoy mejor”, mientras que Ignacio Gil Lázaro se dirigirá a la ministra portavoz, Pilar Alegría, para verificar si son conscientes de la realidad que les rodea.
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, también será interrogado por el diputado Carlos García Adanero, quien le pedirá que aclare si “siempre ha actuado con la debida ética y diligencia”. Por otro lado, la ministra de Vivienda, Isabel Rodríguez, deberá explicar los plazos de rectificación de su política de vivienda, un aspecto que la oposición ha destacado como uno de los puntos débiles del Ejecutivo.
Esta sesión se produce en un momento especialmente crítico para el Gobierno, que busca frenar el desgaste político que la crisis del caso Koldo ha generado. La decisión del Tribunal Supremo de mantener en prisión a Santos Cerdán, debido al riesgo de destrucción de pruebas, así como las últimas informaciones sobre pagos en efectivo desde la sede socialista, han elevado aún más la presión sobre Sánchez en vísperas de su comparecencia en la Cámara Alta.
