Un jurado federal de Estados Unidos ha imputado a John Bolton, exasesor de Seguridad Nacional durante la administración de Donald Trump, por presunto mal uso de información clasificada. La acusación, formalizada el 17 de octubre de 2025 en una corte federal de Maryland, incluye ocho cargos por transmisión de información de defensa nacional y diez por retención indebida de documentos sensibles.
Según el Departamento de Justicia, Bolton utilizó su correo electrónico personal para redactar notas privadas sobre sus actividades diarias en la Casa Blanca, actuando como un diario, durante su tiempo en el Consejo de Seguridad Nacional entre 2017 y 2021. La investigación concluyó que el exasesor era consciente de la naturaleza clasificada del material y, aun así, lo retuvo en su hogar y lo transmitió desde cuentas personales, lo que representa una violación de la normativa federal de protección de secretos de Estado.
Detalles de la acusación
El documento de acusación detalla pasajes específicos en los que Bolton transcribía mensajes identificados como sensibles. En uno de ellos, se menciona: “El informante de inteligencia agregó que…”, lo que evidencia, según el jurado, un manejo deliberado de datos confidenciales. El director del FBI, Kash Patel, fue directo al confirmar los hallazgos de la investigación, afirmando: “John Bolton supuestamente transmitió información de alto secreto utilizando cuentas personales en línea y retuvo dichos documentos en su casa. Esto constituye una violación directa de la ley federal”.
La fiscal general Pam Bondi también se pronunció al respecto, subrayando: “Nadie está por encima de la ley”. Esta serie de acusaciones marca un giro significativo en la carrera de Bolton, quien ha reaccionado con dureza, acusando a la actual administración de utilizar al Departamento de Justicia como un instrumento de represalia política. “La venganza de Trump contra mí comenzó hace tiempo. Jamás comprometería la seguridad nacional de Estados Unidos”, afirmó Bolton en un comunicado.
Reacciones y contexto político
El exasesor recordó que el FBI fue informado en 2021 del hackeo de su correo electrónico, sin que entonces se presentaran cargos en su contra. Desde su perspectiva, los cargos actuales son más una cuestión política que legal. La reacción de Trump, aunque breve, fue significativa. Al ser consultado por una periodista en el Despacho Oval, respondió: “No sabía eso. Pero creo que es una mala persona. Qué lástima. Así van las cosas”.
Con esta acusación, Bolton se convierte en el tercer exalto funcionario crítico con Trump en enfrentar cargos federales en menos de un mes. El primero fue James Comey, exdirector del FBI, imputado por obstrucción al Congreso y falso testimonio. Días después, la fiscal general de Nueva York, Letitia James, fue acusada por presunto fraude bancario y falsedad documental, lo que refleja un clima de creciente tensión en el ámbito político estadounidense.